REENCARNADO COMO EL VILLANO DUQUE ORCO CERDO

Capítulo 2 Reencarne

------------Punto de vista de Loki--------------

La siguiente ves que mi conciencia volvió, estaba en los brazos de un hombre desconocido... No me toques tan casualmente chango mugroso...

¿Qué pasa con esto? ¿En estos casos no se supone que el doctor es una bella mujer?

Cuando me quejaba de cosas tan triviales. El hombre que me sostenía me entrega a una mujer mientras hacia una mueca confundido.

La mujer que ahora me sostiene hace una mueca similar al médico... Bien, ahora todo es como debería. Dejando el mal comienzo a un lado, al echar un vistazo parece que estoy justo en el momento de mi nacimiento, la mujer que me sostiene que parece ser una asistente lava mi cuerpo en una bañera pequeña y lo envuelve delicadamente con una manta antes de entregarme a una mujer que está sentada en una cama.

Con un sedoso cabello negro que brilla con el reflejo de la luna encajando perfectamente con sus ojos purpuras que resplandecen como gema en esa impecablemente hermosa y ordenada cara angelical.

Tal existencia exuberante, no es nada menos que la archiduquesa frii illusius, la mujer que en este mundo me dio a luz, a mí, loki illusius. Aunque se supone que para este momento ya es madre de 3 hijos y está cercana a sus 27 años, su belleza solo puede ser descrita como "cautivante" ... Maldito seas padre explota.

Frii, con una encantadora sonrisa en su rostro toma mi cuerpo recién nacido con sus delicadas manos. El cuerpo de mi madre es lo que podrías llamar delicado, es la impresión a la que puedes llegar al ver su figura blanca como la nieve y exquisitamente moldeada rebosante de feminidad como la porcelana más fina.

Si, has allí todo bien, todo hombre que se respete despertara sus instintos protectores al ver a esa madre mía, si no fuera por....

*Boing*

Ahhhh, ¿morí de nuevo? ¿así era el paraíso? Si es así, ¿Por qué me esforcé tanto en conservar mi vida hasta ahora? estúpido yo...

De hecho, no he muerto, simplemente fui "absorbido" por los enormes pechos de mi madre, si, en contraste a esa figura delicada y ese rostro angelical que despierta tus instintos paternales de protegerla. Los enormes bultos carnosos que sobresalen de su pecho a un nivel que debería ser imposible para su figura, despierta un instinto completamente diferente en los hombres.

[Doctor, ¿no es extraño? No llora]

[Bueno... Es extraño, pero, no hay nada malo con su cuerpo...]

Mientras me perdía en la dicha de lo que sin duda debe ser el paraíso en la tierra, fui forzado a volver a mis sentidos por la charla del doctor y su asistente a un lado de la habitación. Mas bien, ¿aún están aquí? Largo estorbos.

[Hiii]

[No... Solo estábamos evaluando la saludad del niño... Por favor no lo tome a mal...]

Cuando su conversación se empezó a poner grosera, mi madre los fulmino con la mirada.

[Por supuesto entiendo eso. Ahora que su trabajo ha terminado, les pediré que se vallan para que yo pueda alimentar a mi hijo en calma]

Con un tono tranquilo, pero exudando una presión misteriosa, mi mama ordena a las criadas que despidan al doctor y la habitación recupera su calma. Bien mama, te amo... ahora bien, volviendo a estas armar nucleares...

[Oh cielos, así que tienes hambre... bueno, mama te atenderá entonces]

SIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII, o dios, o diosa, o dioses, gracias...

Para mí que use hasta el último gramo de mi fuerza infantil para presionar ligeramente mi mano en los pechos de mi madre e insinuar que tengo hambre (Aunque no la tengo)