REENCARNADO COMO EL VILLANO DUQUE ORCO CERDO

14. TRABAJA

[Entra tu]

[No, entra tu]

[No, tu]

[[[[...]]]]

Frente a la nueva habitación, el grupo discute quien debería abrir la puerta.

¿La razón?

La decoración de la puerta era perturbadora.

Aunque las puertas hasta ahora habían tenido cierta aura siniestra, todas tenían una decoración relativamente simple.

Sin embargo, la puerta frente a ellos era simplemente perturbadora.

Grabados en la negruzca piedra. 

Figuras de personas con expresiones desesperanzadas, eran obligadas a trabajos forzados.

La sensación de angustia y pena eran tan claramente transmitidas que no pueden ser descritas debido a su complejidad.

*Griiiii*

Finalmente, tal vez entendiendo que las cosas no avanzarían a este paso, la puerta se abrió por si misma.

[[[[...]]]]]

Sin mas opciones, el grupo avanzo con cautela.

Las paredes estaban decoradas con historias trágicas que oprimían tu corazón y las columnas eran sostenidas por esculturas puestas en una secuencia de acciones que te hacia entender fácilmente su cruel final.

En toda esa enorme habitación, solo un trono que helaba tu sangre podía verse.

Rostros congelados en miseria y personas amontonadas que se rompían espalda y brazos para formar con sus cuerpos un asiento.

Sobre ese trono de personas miserables que ruegan la misericordia de la muerte, una pequeña niña mira al grupo con su único ojo y una sonrisa tierna.

[Heheheeh]

Nifty, con las manos apoyadas grácilmente sobre sus rodillas, sonríe juguetonamente al ver que el grupo se detuvo a mitad de camino.

En circunstancias normales, la vista podría considerarse adorable.

Una pequeña niña que juega en el trono de su padre, lo que vuelve el asiento desproporcionadamente grande, tanto que sus pequeñas manos ni siquiera pueden llegar al reposabrazos y debe descansarlas en su regazo.

Sin embargo, es poca o ninguna la sensación de satisfacción que pueda surgir de la siniestra escena que rodea el lugar.

Por varios segundos, el grupo y nifty se miraron, pero nada paso.