[LJN] + Cosas Sobre Mi

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CAPÍTULO 20

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Seungcheol tuvo un día ajetreado. Pasó la mayor parte trabajando con el equipo de relaciones públicas en su discurso de inauguración, porque aparentemente no podía simplemente improvisar. Cada palabra tenía que ser perfecta y llegar a la audiencia adecuada. En estos días, las monarquías eran una forma de gobierno impopular y, para seguir siendo apoyadas por su pueblo, tenían que trabajar por ello el doble de duro que las repúblicas. Seungcheol entendió que era necesario, pero todo el trabajo de relaciones públicas era muy agotador y frustrante, y al final del día, sintió ganas de sacar las garras y gruñir, solo para finalmente callar a Cormack.

Ciertamente no ayudó que hubiera estado increíblemente distraído todo el día.

Suspirando, Seungcheol se reclinó en su silla y miró la computadora frente a él sin ver nada. En el fondo, Cormack hablaba sin rodeos sobre sus índices de aprobación, como si Seungcheol no pudiera leer los datos que tenía delante.

Podía leerlo, pero no podía concentrarse en él. Fue un problema recurrente ese día, desde...

Seungcheol trató de alejar el pensamiento, sabiendo que si comenzaba a pensar en ello, no haría nada.

No funcionó.

Por supuesto que no funcionó.

Seguía pensando en la forma en que Jihoon se había sentido a su alrededor, tenso y resbaladizo, tan resbaladizo que era como estar envuelto en la más fina seda... la forma en que miraba a Seungcheol con esa mirada de ojos vidriosos y drogada, sus labios rojos mordidos y separados como gimió

"... Como puede ver, Su Excelencia, si no logra asegurar pronto el matrimonio con el Diamante de la Temporada, hará que sus índices de aprobación disminuyan. No podemos permitirnos el lujo cuando hay una probabilidad tan alta de disturbios civiles-"

"Ya es suficiente" dijo Seungcheol.

Cormack frunció los labios. "Pero su excelencia-"

"Ya he dicho suficiente", repitió, mirándolo. "Puedes retirarte".

Cormack abrió la boca, pero la volvió a cerrar bajo la mirada irritada de Seungcheol. Asintiendo, finalmente se fue.

Seungcheol se pellizcó el puente de la nariz y cerró los ojos, su postura se hundió ahora que estaba solo. Todo lo que había dicho Cormack era cierto. No podía echarse atrás en su noviazgo con Wonwoo; sería más que irresponsable. El hecho de que incluso estuviera pensando en eso era irresponsable. Sabía lo que debía hacer: tenía que visitar a los Jeon y aclarar las cosas con Jihoon. Era importante que estuvieran en la misma página. Tenía que disculparse. Su falta de autocontrol era inaceptable. Jihoon era joven y relativamente inexperto. Puede que no fuera virgen —Seungcheol apretó los dientes, luchando contra la ola inapropiada de fea posesividad—, pero era joven y vulnerable después de su reciente celo. Tenía que asegurarse de que Jihoon no se hubiera sentido herido por sus acciones descuidadas.