[LJN] + Cosas Sobre Mi

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CAPÍTULO 24

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Jihoon había asistido a bastantes fiestas y bailes desde que llegaron a la capital, pero un baile real era otra cosa.

Nunca antes había estado en el palacio, y el lujo era abrumador y humillante. Hizo que Jihoon se diera cuenta de que eran poco más que paletos del campo, invitados solo por el éxito indiscutible de Wonwoo como el Diamante de la Temporada, y porque Seungcheol tenía la intención de casarse con él.

Jihoon se mordió el interior de la mejilla con tanta fuerza que sintió el sabor de la sangre. No pienses en ello, no pienses en ello, no pienses en ello.

Mierda, era difícil no pensar en eso.

Debería haberse quedado en casa. Debería haber inventado alguna excusa para saltarse el baile.

Pero era tan malditamente débil. Tan débil para él. Quería estar allí para Seungcheol; era una noche muy importante para él. Seungcheol sería declarado heredero esta noche. Jihoon no tenía idea de cómo reaccionaría la gente, por lo que quería que Seungcheol tuviera al menos un seguidor en el salón de baile, incluso si era solo un omega sin complicaciones que nadie notó. Quizás a Seungcheol ni siquiera le importaría si estaba allí o no, pero... Jihoon no podía dejar de ir. Incluso si rompió su corazón en un millón de pedazos cuando se anunciara el compromiso de Seungcheol con Wonwoo.

Jihoon no estaba seguro de que se anunciaría esta noche. Hubo fuertes rumores en Internet de que lo sería; aparentemente, alguna fuente confiable del palacio ya lo había filtrado. Wonwoo también estaba al tanto de los rumores, por supuesto, y estaba vestido de punta en blanco, con un traje azul pálido que se le veía increíble. Se veía incluso más hermoso que de costumbre, aunque parecía bastante pálido.

"¿Nervioso?" Jihoon dijo con una sonrisa. Le dolía la cara.

Wonwoo se encogió de hombros, evitando su mirada. "Por supuesto que no. Creo que es extremadamente presuntuoso por parte de Westcliff anunciar nuestro compromiso sin siquiera preguntarme primero". Él se burló. "Pero, de nuevo, es muy característico de él. El cielo no lo quiera que realmente admita estar equivocado".

Jihoon abrazó su pecho con los brazos. "Dale una oportunidad. No es tan malo". Se sentía como si cada palabra le rascara el interior de la garganta. Se odiaba a sí mismo por los feos y ardientes celos que le retorcían las entrañas. Amaba a su hermano. Él lo hace. No debería sentirse así.

De repente, murmullos emocionados llenaron el aire y Jihoon giró la cabeza.

"Ése es el príncipe Jeonghan" susurró Wonwoo, tomando a Jihoon del brazo.

Jihoon podía ver eso.

Ahora podía entender por qué el príncipe Jeonghan era tan querido. Prácticamente exudaba calidez. Era muy fácil de agradar. La forma en que sonreía era afable y con los pies en la tierra. Si bien era guapo, no era demasiado guapo, ni mucho menos tan intimidantemente guapo como Seungcheol. Cuando Seungcheol siguió a Jeonghan al salón de baile, Jihoon no pudo evitar notar el marcado contraste entre la forma en que la gente los miraba: miraban a Seungcheol con una mezcla de atracción reacia, envidia y cautela, mientras que miraban a Jeonghan con sonrisas fáciles y cariño. Jeonghan realmente era el Príncipe Dorado: genuinamente amado por su pueblo, a pesar de toda la controversia reciente en torno a su matrimonio con un alfa kadariano. Jihoon ahora entendió por qué el equipo de publicidad real temía los disturbios cuando se anunció la desheredación del príncipe Jeonghan.