La Intimidad Del Tacto Leve

Pienso en el final.

Se dice que nadie muere en la víspera. Toda su vida, Catalina Varda pensó que aquello era una completa estupidez; fue precisamente ese tipo de pensamiento que la llevó a intentar tomar su vida: si había alguien que debía controlar ese tipo de cosas, era uno mismo. Fue por ello que resultó una completa sorpresa que un hermoso día; con el olor del café aún en el aire, su compañero de piso acomodando los platos, su amigo rubio en el sillón con el portátil abierto y editando música, su novia aún envuelta en el calor que su cuerpo había dejado, sus dos amigas en camino para un día de juegos de mesa; Catalina Varda decidiese ir a comprar donas para todos. 

Normalmente, ella no haría esas cosas, no, se conformaría con lo que había en casa; pero aquel día sintió la necesidad de agradecer la belleza que de pronto había en su vida con algo dulce. Amaba a sus amigos, y ellos la amaban a ella. 

Tal vez si hubiese salido unos segundos antes o después, aquella situación pudo haber sido evitada; pero el destino y sus juegos tiene el instante perfecto para cada momento. 

Fue por ello que cruzando la pista en un semáforo verde, decidió revisar el celular con emoción para saber si las personas que más amaba necesitaban algo. Fue por ello que justo, en ese preciso momento, como si alguien escribiendo un tonto final a una historia, Dios decidió que a un auto le fallarían los frenos. 

Los transeúntes se organizaron al rededor de ella, y con urgencia llamaron a los paramédicos, para luego tomar el celular de su mano inmóvil y llamar a las personas con las que estaba hablando. 

Fue una batalla ardua, de horas y llantos incesantes. De un rubio y un moreno con rulos rezándole a algo a lo que no creían, de dos chicas llorando, intentando frenar a una joven que parecía estar frente a lo que era la última gota que derramaba el vaso. 

El Lunes, a las 11:45 am, Catalina Varda murió. 

JASDFASFJASDF ERA BROMA PERDÓN AQUÍ VA EL CAPÍTULO. 

"¿Por qué no podemos solo comprar el que sea? Son ratas de cualquier forma." Habíamos pasado media hora comparando las imágenes que teníamos del difunto hámster de Matt con los animalitos en la tendía; y, considerando lo mucho que se movían, era una tarea extremadamente difícil. 

"Porque sabes qué tan triste está Matt por ello, debe ser exactamente igual." En mi mente, si le conseguíamos un reemplazo idéntico tal vez Matt olvidaría eventualmente que su anterior mascota estaba muerta y que había revivido por arte de magia.