Crush ⎯ KOOKMIN

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Una vez habían llegado a la única zona verde de la escuela, la cancha de fútbol, se sentaron en las gradas donde el sol quemaba.

Entonces el de pelo rubio lo dejó salir todo, mientras el de lentes se preparaba mentalmente para darle a su amigo todo el apoyo moral necesario.

"¿No soy lo suficientemente lindo?", preguntó al más bajo mientras se rodeaba a sí mismo con sus brazos, "tal vez a Yoongi le gustaría si me cortara el cabello, o si volviera a mi color natural".

Jimin no estaba dispuesto a seguir escuchando como su amigo hablaba mal de sí mismo, "Deja de decir esa mierda, Taehyung", le dijo sacudiendolo por los hombros, "no puedes cambiar algo de ti solo porque alguien no te acepta como eres".

"Pero, ¿qué tengo que hacer para que él me tome en cuenta?", le preguntó con una leve desesperación en su voz, mientras apoyaba su cabeza en el hombro del pelinegro.

"El problema no eres tú", le aseguró Jimin, "el problema es él, no debes esperar nada de alguien que disfruta de tener media docena de personas enamoradas", siguió mientras pasaba su brazo por la espalda de su amigo, "a esa clase de personas no les importa dejar un corazón roto".

Taehyung formó una sonrisa triste, "Eres tan sabio, Park", bromeó con resignación en su voz, "tal vez deba dejar de lado todo mi intento de acercarme a Min Yoongi".

El de lentes estaba listo para darle la enhorabuena a su amigo y decirle que ese era el primer paso para superar a alguien, cuando divisaron dos personas con chaquetas negras dirigiéndose hacia ellos.

Las chaquetas del equipo de fútbol, aquellas personas que se acercaban no eran nada menos que Min Yoongi y Kim Namjoon, dos de los jugadores estrella.

Jimin tragó saliva mientras las dos figuras acortaban la distancia entre ellos y las gradas de la cancha, y pudo ver como Taehyung se ponía completamente ansioso.

"Te estaba buscando, Taehyung", le dijo Yoongi al peliteñido, una vez se detuvo en frente del dúo de amigos, "querría saber si te gustaría venir a la fiesta que Hoseok dará esta noche, ya sabes, como casi todos los viernes".

Tanto Jimin como Taehyung pensaron que había algo mal con sus oídos, no existía forma en que lo que Yoongi había dicho fuese real.

Entonces Yoongi hizo esa sonrisa capaz de hacer que cualquier chica perdiese su dignidad, y el de lentes supo que su amigo caería rendido ante los pies del de piel blanca como la nieve una vez más.

"M-Me encantaría", dijo Taehyung apenado y nervioso, "pero hoy me voy de vacaciones con mi familia, por dos semanas, no podré ir". 

"Oh", exclamó Yoongi con una clara sorpresa en su voz, obviamente no estaba acostumbrado al rechazo, de ningún tipo, "entonces, disfruta, tal vez cuando vuelvas podamos salir y charlar".

El más alto del dúo de amigos ahogó un grito, "Claro, Yoongi, t-te veré después" dijo. Jimin reprimió el impulso de golpearse la frente con la palma de su mano.

Entonces Yoongi y Namjoon centraron su atención en Jimin al mismo tiempo, y este sintió un escalofrío recorrer su cuerpo de pies a cabeza. Seguramente harían un chiste sobre sus lentes, puesto que dudaba que dijeran algo sobre el hecho de que era gay, ahora que Yoongi se había besado con Taehyung en secreto.

"Bueno, nos vemos, Taehyung", dijo Yoongi para posteriormente regalarle un guiño de ojo al nombrado, y dar la vuelta hacia la entrada a los pasillos de la escuela. Tanto el de piel clara como Namjoon se fueron por donde habían llegado.

Jimin estaba aliviado, "Qué extraño", dijo con un tono sarcástico, "normalmente soy insultado o empujado contra una pared cada vez que estoy cerca de alguno de ellos".

"¡¿Escuchaste lo mismo que yo?!" exclamó Taehyung cuando las siluetas de los dos atletas ya no se veían debido a la distancia,"¡Min Yoongi me invitó a una fiesta!".

"No voy a negarlo, eso me tomó por sorpresa", le dijo Jimin, "como sea, hablando de tu plan para superar a Yoon-".

"¿Bromeas?", lo interrumpió el rubio, "¡me invitó a una fiesta!, de seguro tengo una oportunidad". 

"Taehyung, ¿te das cuenta de lo que estás diciendo?", le reprendió el más bajo con enojo y preocupación, "hace tan solo unos minutos estabas llorando por él".

Entonces Taehyung, ofendido, se cruzó de brazos y le dijo, "Pues sí, pero es algo normal, ¿no?", dijo esperanzado, "una historia de amor nunca es épica si no tiene complicaciones".

"¿Y no que ya le habías contado que te ibas a ir de vacaciones?", le preguntó Jimin, "ni siquiera presta atención a lo que le dices".

"Bueno, cuando estuvimos juntos lo noté inquieto y ansioso", aseguró el rubio, "seguramente tenía algún problema y no prestó mucha atención a las cosas que le decía". Jimin ató cabos sueltos y estuvo apunto de pararse e ir a enfrentar a Yoongi, por más que eso sería cavar su propia tumba.

El más bajo agarró las muñecas de Taehyung con ambas manos, "Taehyung, te diré algo muy feo, debes prometerme que no te vas a enojar conmigo". El nombrado levantó la ceja, extrañado, "Seguro", dijo.

"Yoongi estaba nervioso porque no quería que nadie los viese juntos", Jimin le dijo finalmente.

Taehyung se paró de inmediato y apretó ambos puños a sus costados, "¡¿Por qué siquiera me dirías algo así?!", dijo alzando su tono de voz.

"¡Estoy intentando ayudarte!", dijo Jimin un tanto desesperado e intimidado por la reacción brusca de su amigo, "Yoongi solo va a hacerte sufrir".

Taehyung, ya más calmado, volvió a sentarse al lado del más bajo, "Perdón por haberte gritado", le dijo, "pero realmente quiero volver a salir con él, no caeré en ningún juego, ¿sí?, confìa en mí".

"Confío en ti", dijo Jimin, "pero si sales lastimado, Yoongi puede considerarse un hombre muerto, y yo un hombre tras las rejas".

Taehyung soltó una carcajada, y Jimin estuvo a punto de continuar con sus amenazas cuando vió algo desconcertante.

En primera instancia, vio la chaqueta negra del equipo y asumió que era Yoongi o Namjoon, regresando con la intención de burlarse de él.

Pero eso le habría dado menos miedo que lo que sea que quería quien se acercaba, después de todo, el semblante que Jeon Jungkook puso cuando se paró en frente de Jimin fue completamente indescifrable.