C a p í t u l o - 7.

9.7K 1.5K 810
                                    

WuXian veía al montón de omegas rodear a Wang LingJiao, tenían casi todo el día acosándola y haciendo preguntas de su noche. El gitano sólo podía poner los ojos en blanco al escuchar todas sus mentiras. MianMian también hacía gestos de irritación cada vez que la escuchaba hablar, el único que parecía indiferente a todo era Wen Ning, quien bebía con alegría una taza de té recién hecho.

—Estoy exhausta, nuestro príncipe siempre agota toda mi energía—dijo en voz alta LingJiao, incluso miró con burla en dirección de WuXian. —Desde que llegué no me soltó en toda la noche.

Varios murmullos y felicitaciones se hicieron presentes, pero WuXian no logró contener su risa al recordar que él se había encontrado a Lan WangJi por la noche, y que este parecía ni siquiera saber quien era LingJiao, así que dudaba de que alguna de las palabras que la omega decía fueran ciertas.

—¿Por qué sonríes tú?—preguntó MianMian al no comprender la reacción de WuXian, técnicamente parecía un loco sonriendo a la nada.

WuXian levantó la mirada. —Esa bruja miente.

Wen QiongLin y Luo QingYang se miraron mutuamente por aquella declaración, Wei WuXian se veía tan seguro que sólo les hacía aumentar su curiosidad.

El Wen se aventuró a preguntar. —¿Cómo lo sabes?

WuXian los miró, dudó en decirles la verdad, pero en realidad no perdía nada. Con el poco tiempo que llevaban conviviendo había logrado confiar en ambos.

—Ayer por la noche yo me encontré con el príncipe—terminó confesado el joven gitano.

—¿Qué?—Wen Ning casi derramó su té.

MianMian le jaló de la túnica—¡Te volviste a escapar!—riñó MianMian. —¡Deja de hacerlo o te meterás en problemas! ¡Peor aún, me meterás a mi!

WuXian se soltó del agarre e intentó tranquilizarla. —Nadie me vio.

Los ojos grises se desviaron al notar que la beta no lo mataría, discretamente volvió a enfocarse en Wang LingJiao, no es que le importara mucho, pero empezaba a cansarse de los alardes que soltaba esa mujer. Mientras más escuchaba sus falsas declaraciones, más ganas tenía de tumbarle su espectáculo.

—El príncipe puede ser muy intenso la verdad, parece que se ha desquitado conmigo—dijo con fingida voz cansada y chillona la omega—, siempre es tan pasional que asusta.

MianMian bufó en voz baja, habló para ser escuchada por los dos omegas presentes más cercanos. —Yo dudo que se le pare para empezar.

—¡MianMian!—el rostro del Wen iba de blanco a rojo, sabía que si alguien escuchaba a QingYang diciendo eso sería castigada sin duda.

Wang LingJiao continuó hablando y expresando lo magnífica que había sido su noche. Wei WuXian simplemente no pudo seguir escuchando.

—Ya me cansé de esto—el gitano se levantó con decisión y caminó para acercarse al tumultuoso grupo de omegas, cuando estuvo lo suficientemente próximo a ellos levantó su voz. —Pues yo escuché que el príncipe ni siquiera se presentó anoche.

En cuanto dijo aquellas palabras todos se hicieron a un lado, dejando que Wang LingJiao se acercara al gitano para estar frente a frente.

—¿Me estás llamando mentirosa?—cuestionó LingJiao con una mirada venenosa.

A pesar de que WuXian sabía la verdad debía ser cuidadoso con sus palabras, no tenía pruebas de nada y no podía revelar a los cuatro vientos que había escapado del harén o se metería en problemas.

Wei WuXian permaneció firme. —Sólo digo que si estuvieras tantas veces con el príncipe como tú dices ya hubieras dado aunque sea un heredero, pero no es así.

Omega en el HarénDonde viven las historias. Descúbrelo ahora