003. LLAMAMOS AL TAXI DEL TORMENTO ETERNO

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Meredith.

El plan era simple, ir por Percy y Zashenka, sacarlos de Mariwether sin llamar la atención e irnos al campamento. Pero, ¿Cuándo sale algo como planeamos?, yo tengo esa respuesta y es N-U-N-C-A y hoy no sería la excepción. Justo hoy los lestrigones, uno de los monstruos que atacaron mi escuela en Londres, decidieron ir tras el hijo de Poseidón, y sumándole a eso, mis dos amigos se encontraban junto a un ciclope, de quien al parecer era amigos. Nada estaba saliendo según el plan.

Aun con la gorra puesta, me dirigí, junto a Annabeth y Zashenka, a un callejón en la calle Church. Esperamos unos pocos minutos, antes de poder divisar a los dos faltantes, me acerque a ambos para poder tirar de ellos, justo cuando un camión de bomberos iba para la Preparatoria Meriwether.

"¿Dónde lo encontraste?" Preguntó Annabeth, señalando al ciclope.

"Responde, Percy" dije con un poco de impaciencia.

Ahora, en circunstancias diferentes, yo habría sido realmente feliz de ver a Percy. Con él, el verano pasado, tratamos de llevarnos mucho mejor, aunque para mi, particularmente, era difícil por que no confiaba demasiado, soy hija de Hades y el no me agradaba mucho. Aunque lo eh extrañado mas de lo que me gustaría admitir.

"Él, es nuestro amigo" dijo Percy, señalando a Byakko y a él.

"¿Está sin hogar?" pregunto Annabeth.

"¿Qué tiene eso que ver?" pregunto Zashenka "Oye, él puede oírte sabes. ¿Por qué no le preguntas a él?"

Eso si que fue una sorpresa para mí, por lo que no dude en preguntar. "¿Él puede hablar?"

"Hablo," admitió Tyson, mirándome. "Tú eres bonita. Mas de lo que Percy dijo."

"Eso... Eso no es verdad" hablo, Percy nervioso.

"¡Ah, asqueroso!" me aparte del amigo de Percy, para ponerme al lado de Annabeth. 

Percy, ignoro mi comentario para poder examinar las manos de Tyson, de seguro creía que debían de haber estado gravemente quemadas por esquivar balas ardientes, pero, para sorpresa suya, estaban bien —sucias y lleno de cicatrices, con uñas sucias el tamaño de las papas fritas— pero al parecer siempre se veían así.

"Tyson," dijo Percy, con incredulidad. "Tus manos no están ni siquiera quemadas."

"Por supuesto que no." Annabeth murmuró.

"Me sorprende que el lestrigón haya tenido las agallas para atacarte con él alrededor." dije, cruzada de brazos "aunque, déjame decirte, que cuando ambos se juntan no sale nada bueno."

"¿Lestrigones?" pregunto Zashenka al darse cuenta de mis palabras. "Oh, dioses"

Tyson parecía fascinado por el pelo rubio Annabeth. Trató de tocarlo, pero ella le golpeó la mano.

"Meredith," me llamo, Percy "¿De qué estás hablando? ¿Lestri-qué?"

"Lestrigones." respondí "Los monstruos en el gimnasio. Son una raza de caníbales gigantes que viven en el extremo norte. Uno me siguió hace meses cuando me fui de Nueva York con Illois."

"Odiseo se encontró con uno una vez, pero nunca he visto uno tan al sur como Nueva York antes." comento Annabeth.

"Lestri—ni siquiera puedo decir eso. ¿Cómo se llaman en Inglés?"

Lo pensé por un momento. "Canadienses," decidí. "Ahora vamos, tenemos que salir de aquí."

"La policía estará detrás de mí." Percy, señalo.

Percy Jackson y El Mar de los Monstruos || Percy Jackson Y Tu ||  [Completa]Where stories live. Discover now