Percy Jackson y El Mar de los Monstruos || Percy Jackson Y Tu || [Completa]

020. NADIE CONSIGUE EL VELLOCINO DE ORO (2/5)

Percy.

"¡He atrapado a Nadie!" decía Polifemo, regodeándose.

Nos deslizamos hasta la entrada de la caverna y al asomarnos vimos al cíclope, que sonreía con aire malvado y sostenía un puñado de aire. El monstruo agitó el puño y una gorra de béisbol cayó al suelo planeando. Allí estaba Meredith, sujeta por las piernas y retorciéndose boca abajo.

"¡Suéltame idiota!" grito Mer.

"¡Ja!" dijo Polifemo "¡Repulsiva niña invisible! Ya tengo otra muy peleona para casarme. ¡A ti te voy a asar con salsa picante de mango!"

Meredith forcejeaba, pero parecía aturdida. Tenía un corte muy feo en la frente y los ojos vidriosos. Por un momento recordé mi sueño, no podía dejar que ella muriera.

"Voy a atacarlo" susurré a Clarisse "Nuestro barco está en la otra parte de la isla. Tú, Zashenka, Annabeth y Grover..."

"Ni hablar" dijeron los cuatro al unísono. Clarisse iba armada con una lanza rematada con un cuerno de cordero que había sacado de la colección del cíclope. Grover había encontrado un hueso de muslo de oveja con el que no parecía demasiado contento, pero lo blandía como si fuese una porra, Zashenka tenia su espada en mano y Annabeth su cuchillo.

"Atacaremos juntos" gruñó Clarisse.

"Sí" dijo Grover. Y pestañeó atónito, como si no pudiera creer que hubiese coincidido en algo con Clarisse.

"Es nuestra amiga, debemos ayudarla" dijo Annabeth.

"Está bien" dije "Plan de ataque Macedonia."

Ellos asintieron. Los cinco habíamos pasado los mismos cursos de entrenamiento en el Campamento Mestizo.

Sabían de qué estaba hablando. Ellos se deslizarían a hurtadillas y atacarían al cíclope por los flancos mientras yo atraía su atención por el frente. Seguramente, aquello significaba que moriríamos todos, y no sólo yo, pero no por eso dejaba de agradecer su apoyo.

Blandí mi espada y grité:

"¡Eh, tú, bicho horrible!"

El gigante giró en redondo.

"¿Otro? ¿Tú quién eres?"

"Deja a mi amiga. Soy yo el que te insultó."

"¿Tú eres Nadie?"

"¡Eso es, apestoso barril de moco!" No sonaba tan bien como los insultos de Mer, pero fue lo único que se me ocurrió "¡Yo soy Nadie y a mucha honra! Ahora, déjala en el suelo y ven aquí. Quiero sacarte el ojo otra vez."

"¡¡Raaaarrr!!" rugió.

La buena noticia: soltó a Meredith. La mala: la dejó caer de cabeza sobre unas rocas, donde quedó inmóvil como un muñeco de trapo.

Otra mala noticia: Polifemo corrió hacia mí, quinientos apestosos kilos de cíclope que debía combatir con mi pequeña espada.

"¡Por Pan!" Grover surgió por la derecha junto a Annabeth y lanzó su hueso de oveja, que rebotó, inofensivo, en la frente del monstruo, Annabeth lanzo su cuchillo directo al pie del cíclope pero este lo pateo como si de un balón se tratara. Clarisse apareció por la izquierda con Zashenka, colocó la lanza contra el suelo, justo a tiempo para que el cíclope la pisara, y se echó a un lado para no quedar atrapada. Polifemo soltó un aullido de dolor, pero se arrancó la lanza como si fuese una astilla y siguió avanzando, Zashenka blandió la espada y la lanzo directo al vientre del Polifemo pero este evito la espada y lanzo directo al suelo.

Aguardé con la espada preparada.

El monstruo trató de agarrarme con su mano gigantesca. Yo rodé de lado y le lancé un tajo en el muslo.