𝙿𝚘𝚜𝚎𝚜𝚒𝚟𝚘 | Jeon Jungkook y TN [Editando]

»31«

Y luego de cuatro largos años, a SeHun se le ocurre reaparecer en mi vida, lo peor es que tiene el maldito descaro de llegar y llamarme "amor" enfrente de Jungkook. Quién sabe con cuántas tipas se ha acostado y viene aquí a fingir que no me ha olvidado.

— ¿Amor? —miré a Jungkook, quien había repetido aquella palabra que SeHun había dicho. Mierda, se veía extremadamente enojado. Soltó mi mano y se acercó a SeHun, esto no me olía para nada bien.— ¿Quién te crees que eres tú para llegar y decirle amor a TN?

— Soy Park SeHun, el novio de TN —no le tuvo ni un poco de miedo y se acercó aún más a él, eran literalmente del mismo tamaño.— ¿Verdad amor?

Que asqueroso se oye que me llame de esa forma.

— Tú y yo no somos nada SeHun, hace cuatro años que te fuiste y jamás volviste, yo ya rehice mi vida —me cruce de brazos manteniendo una postura seria.

— Pero te prometí que volvería —hizo el intento de acercarse, pero Jungkook no lo dejó, a lo cual él respondió dándole un empujón.

Ay no, lo que faltaba, que se agarren a golpes.

Deja que el bad boy le dé su merecido.

Si lo dejo es capaz de matarlo.

— No me vuelvas a tocar en tu puta vida —le advirtió Jungkook apretando los dientes.

— ¿O que? —SeHun rio con arrogancia, atreviéndose a desafiar a Jungkook. Eso no era una buena idea.

— Te voy a bajar los dientes y haré que nunca te olvides de mi —Jungkook se quitó la mochila y la aventó al piso, acto que SeHun repitió.

Ahn que estaba al lado de SeHun corrió hacia mí y se prendió fuerte de mi brazo, ninguna de las dos podíamos hacer nada, ellos estaban dispuestos a matarse. Pero como si del cielo cayese un milagro, Jin y Yoongi llegaron a tiempo para detenerlos.

Estuvo cerca.

— ¿Qué es lo que piensan hacer? —Jin alejó a Jungkook quien ejercía resistencia.— Cálmate idiota, esto es una universidad no un lugar de peleas clandestinas.

Jungkook empujó a Jin y levantó su mochila, ni siquiera se fijó en mí solo se fue subiendo las escaleras dirigiéndose a los salones. ¡Mierda y más mierda!, SeHun solo vino para arruinar mi vida.

Corrí detrás de él, iba a ser una tarea difícil lograr que me escuchará, es Jungkook, el chico más bipolar que he conocido, nada es fácil con él. Al llegar a nuestro salón, entré, encontrándome con él acomodando sus cosas en su asiento.

— Jungkook —me acerqué con cautela, no quería llevarme sorpresas.— Oye, háblame, dime algo, así me grites lo que sea, pero no me ignores.

Mi corazón dolía, justo ayer nos habíamos reconciliado luego de dos semanas sin hablarnos, hicimos el amor, nos volvimos novios, estábamos felices y en tan solo dos segundos todo eso se había desmoronado.

— ¿Y qué quieres que te diga? —habló de repente sacándome un pequeño susto por lo fuerte que lo hizo.— ¿Cómo quieres que esté luego de que el ex de mi novia llega y la llama amor?

— Jungkook, SeHun es un idiota, ya te lo había explicado ayer, él y yo nunca pusimos un fin definitorio a nuestra relación, pero ya está terminada para mí —expliqué.

— Al parecer él no lo ve así —sus manos se volvieron puños, los apretaba tan fuerte que se pusieron rojos.

— ¿Y eso que importa? Jungkook yo no siento nada por él, no importa si volvió, nunca tendremos algo de nuevo —dejé mi mochila en mi asiento y lo tomé de las mejillas.— Yo te quiero a ti, solo a ti.

Besé sus labios, pero él no respondía. ¿Tan rápido dejó de quererme? ¿En serio se va a poner así por algo tan estúpido como lo que pasó allá afuera?

— Jungkook por favor, deja eso atrás —me alejé de él, aún conservaba su mirada fría hacia mí.

— No puedo, me hierve la sangre de solo pensar que el maldito que te hizo suya primero está aquí y te llamó amor—le dio un golpe a su mesa. Este hombre ama golpear las cosas y a los humanos.

— ¿Y eso qué? —me acerqué, posé mis manos en su pecho y lo hice sentarse sobre su mesa, mientras yo me colocaba entre sus piernas y me acercaba a su oído para susurrarle:— Él habrá sido el primero en tocarme, pero tú fuiste el primero en hacerme delirar, el que logró que mi cuerpo llegará al éxtasis, quien me llevó a tocar las estrellas. Fuiste tú el primero y él único que me dio satisfacción verdaderamente.

Besé su cuello y fue cuando reaccionó, sus manos apretaron mi cintura, pegándome mucho más a su cuerpo. Sus labios atraparon los míos, me prendí con fuerza a su nuca e introduje mi lengua dentro de su boca. Él rio en medio del beso porque eso había sido muy sorprendente de mi parte.

Nuestras lenguas danzaban una con la otra, nuestros cuerpos cada vez pedían más y era por eso que poco a poco fuimos parando o terminaríamos haciendo algo indebido en el salón. El beso se tornó lento y al final nuestros labios se soltaron.

— Carajo, bésame así siempre —pidió con la respiración agitada.

— Claro, cuando no estemos en la universidad —ambos reímos y nos dimos un pequeño beso.— Recuerda que solo te quiero a ti y a nadie más.

— Perdón por la forma en la que me comporte allá afuera, es solo que los celos me ganaron —en sus ojos podía notar el arrepentimiento. Por lo menos estaba más tranquilo y me lo demostraba acariciando mi cintura con las yemas de sus dedos, eran toques delicados.

— Te entiendo, yo también me pondría así si mañana llega una tipa y te llama mi amor —sonrió y beso mi mejilla.

El timbre del inicio de las clases había sonado. Fui a mi asiento, luego comenzaron a llegar los demás alumnos, para nuestra mala suerte, SeHun estaba en el mismo año. ¿Algo más que deba pasarme?.

— ¿Todo bien con el bad boy? —preguntó Ahn y yo sonreí.

— Más que perfecto.

— ¿Y ese anillo? —Yoongi tomó mi mano en la que llevaba el anillo con el cual Jungkook me pidió ayer que fuera su novia.— ¿Son las iniciales de Jungkook?

— Así es, de hecho es de él, me lo dió ayer...cuando me pidió ser su novia —expuse rápido. Los tres mostraban asombro en sus rostros.

— ¿¡Ya son novios!? —Jin había gritado tan fuerte, que nos ganamos la atención de toda la clase y el susto del pobre profesor de física que llegaba justo al salón.— ¡Mi niña tiene novio!

Quería cavar un pozo en el suelo y meterme ahí, no es que no me guste que todos sepan que ya tengo pareja, sino que me avergüenza la forma en que Jin grita, parece una madre orgullosa, lo amo. Giré mi cabeza hasta el fondo del salón, donde estaba Jungkook muriéndose de la risa.

Dios mío, Jin es único.

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                      —Eternitely