C A P I T U L O 6

4K 282 117
                                    

C a p i t u l o 6

"Harry"

La lluvia no había cedido demasiado, había horas en las que parecía aumentar su fuerza y otras en las que simulaba calmarse sólo para aumentar grotescamente

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La lluvia no había cedido demasiado, había horas en las que parecía aumentar su fuerza y otras en las que simulaba calmarse sólo para aumentar grotescamente.

Consigo llegar a los estudios después de manejar con demasiada lentitud y saludo a Paul, quien sorpresivamente, me informa que solamente han llegado Amélie, Sara, Mitch y Mark debido a que el clima se ha vuelto una complicación para que el resto pueda llegar.

Adentro, todos se encuentran sentados conversando y riendo de cosas que no comprendo.

— ¡Buenos días! — Sarah grita haciendo que entrecierre mis ojos

— ¿Puedes no gritar? por favor — pido

— ¡No! ¡Necesito que vivas los estragos de beber sin control!

— Mitch — llamo a mi amigo — ¿Puedes pedirle a tu novia que deje de gritar?

— Claro — responde tranquilo para después ponerse a gritar — ¡Oye, amor! ¡Dice Harry que sí puedes dejar de gritar!

— ¡Me parece que eso será complicado!

— ¡Lo siento, Harry! ¡Sarah ha dicho que...!

— Sí, sí, ya entendí — interrumpo a mi mejor amigo y todos ríen por la escena que acabamos de montar

— ¿Te duele mucho a cabeza? — Amélie pregunta cuando me siento a su lado y amablemente me extiende una aspirina y una botella de agua

— No la soporto — admito

— Creí que te quedarías en casa — menciona la baterista

— Ya estuve mucho tiempo encerrado

— Es bueno que lo reconozcas — dice Mitch — A todo esto ¿podemos saber a qué se debió tu impulso de beber y conducir por la ciudad en plena tormenta?

Me quedo en silencio bajo la mirada de todos y a manera de distracción, comienzo a jugar con los anillos que hay en mis dedos.

Tenía que ser sincero, más no sabía sí era el momento o sí estaba listo para serlo.

— Sabes que no te juzgaremos, Harry — Mark interrumpe mis pensamientos

— Lo sé — suspiro

Como si fuera mi salvación, la puerta principal se abre provocando que todos giremos para observar a la pequeña persona que viene entrando y maldiciendo en ¿español?

— ¡Buenos días a ti también, Alessia! — Mark grita divertido haciendo que la chica levante la vista y yo vuelva a quejarme por el exceso de ruido

— Hola a todos — Alessia responde con la respiración agitada

La castaña viene con su bolso colgando y dos charolas en las manos que vienen ocupadas con algunos vasos de cartón.

LONDON BOY | H.S. (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora