Capítulo 19

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Conduce a través de la noche, pasamos un poste de luz tras otro. El viento que sentimos por la velocidad de la motocicleta, es un tanto gratificante para mi.

Mi cabeza vuelve hora atrás, cuando dudé sobre salir. ¿Estaba haciendo lo suficiente por mi madre? Layla dijo que es todo lo que podía dar de mí misma. Si quería ayudar de alguna otra manera primero debía asegurarme de estar bien emocional y físicamente.

Intentar ayudar a alguien a veces conlleva caer en el mismo abismo del que intentas salvarle.

Cuando vi mi reflejo en el baño de la clínica fue cuando comprendí muchas cosas. Me parecía otra vez a la Sky que huyó de casa, eso era algo que odiaba.

Así que debía ser fuerte, también debía preocuparme por mi. Por que yo también importo y eso es algo que en mi pasado no tuvieron presente. Estaba bien darme un respiro, estaba bien sonreír e intentar alcanzar mi propia felicidad.

Jasper empieza a dirigirse a un lugar de la ciudad que conozco muy bien.

Jasper Lewington es todo lo que está bien justo ahora, tengo presente su apoyo y sus intentos por lograr que cambie para bien.

Al igual que yo, es uno de los humanos tontos que sacamos las garras cuando alguien intenta entrar en nuestras vidas. Sin embargo a penas pasas la prueba de fuego, mostramos nuestra forma de ser real.

Apoyo mi cabeza sobre su espalda, como él dijo: Todo va a estar bien.

Pasamos de la cafetería en la que trabajaba, mi jefa lo ha cerrado temporalmente. Gira hacía la izquierda, adentrándose en una calle que nos lleva al pie de una colina.

— Llegamos, Julieta.

Algo dentro de mi quiere saltar hacía él y darle un abrazo. Recuerda este lugar, me ha traído a la colina. Una emoción grande me embarga al saber que alguien escuchó mi historia y logró rescatar lo bueno de ella.

— Vamos —digo con la voz débil.

Sin previo aviso me toma de la mano y empezamos a subir. La hierba ha crecido mucho desde la última vez que vine, llega a la mitad de nuestras piernas.

Se que los demás también se preocupan por mi, pero esto es diferente.

Caminamos en silencio, me doy cuenta de que sin darnos cuentas ambos hemos tomado la actitud de novios. Hasta parece real, pero esta lejos de lo que somos.

Observo nuestras manos, él guiándonos a través del pasto. Como si escalaramos hacía el cielo en busca de nuestra de luz, en busca de una estrella.

Mi corazón se siente pesado cuando al llegar veo una manta al pie del tronco donde nos sentamos la última vez que estuvimos aquí. En medio hay una canasta de picnic y una gran vela que proporciona la suficiente luz.

Contando EstrellasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora