La vida de Sky Lerman se ha basado en tener una tragedia tras otra, algo sin fin como intentar contar todas las estrellas.
Sky nunca esperó que después de huir de casa su vida diera un giro drástico. Justo ahora no sabe cómo terminó viviendo en la...
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Dormí junto a Layla, sé muy bien los momentos en que deseamos estar solos. Cuando yo llegué a este lugar solo quería eso, por fin tenía un momento de paz y solo quería un duelo solitario de mi pasado.
Toco su puerta y apenas escucho un audible:
— Pasa.
Está de pie cerca de la ventana, se abraza a si misma mientras observa el paisaje.
— ¿Irás a la preparatoria? —pregunto de manera suave.
— No se si sea seguro —responde despacio.
— No quiero dejarte sola, me quedaré contigo.
— No... El profesor Wright habló conmigo. Me aclaró todo, dijo que Rebecca y Ryan van a cuidarme estos días —Noto otra vez el rendimiento en su voz. Cuando se gira veo los rastros de lágrimas secas, al menos parece un poco mejor— No quiero que te perjudiques por mí, tuviste varias faltas hace un par de semanas.
La miro con duda, sé que el espacio es lo mejor; pero siento que Susan está reprimiendo muchas cosas.
¿Sabía que ella estaba tan mal? No, nunca me dí cuenta. Creía que su vida era difícil por tener padres tan estrictos y fríos, pero nunca creí que ella corriera algún tipo de peligro. Me concentré tanto en mi misma, en mi dolor, en mi nueva vida; que olvidé mi vida antigua y con ella a Susan.
— Está bien —digo sintiendo mi corazón llenarse de culpa—. No dudes en llamarme para lo que sea.
Ella me sonríe débilmente, sus ojos se llenan de lágrimas. Me da la espalda rápido regresando su vista al balcón.
— Gracias, Sky —No quiere que la vea llorar otra vez.
Me obligo a irme, rogando a las estrellas para que le den consuelo.
Isaac nos lleva a la preparatoria. Me paso la mañana siendo un títere que Layla se encarga de mover, no tengo energía para nada.
Durante los recesos es sólo ver un espectáculo de Jasper y sus nuevos amigos. Amigos que me siguen dando mala espina. Talvez los estoy jugando mal a ellos, antes lo hacía mucho.
Megan otra vez lo abraza. Los rumores de nuestro falso rompimiento ya se esparcieron entre todos nuestros compañeros de clase.
Ignoro todo, hasta a él.
Las clases finalizan y el regreso a casa es igual de rutinario. Susan sigue encerrada, Layla e Isaac salen juntos, Haden aún continúa en la preparatoria. Rebecca plática con Ryan, ambos intentan ayudar juntos a mi amiga. Se los agradezco internamente.
Decido salir de casa, al principio tengo miedo por que iré sola, pero voy al cuarto de Layla por algo grande que me cubra. Encuentro una enorme sudadera celeste grisáceo. La capucha me cubre lo suficiente para que nadie me note.
