Capítulo 7

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Alana

El día fue tan diferente a lo habitual,  cada instante que pasa me hace ver que mi vida ya no es la misma de hace unos meses. Hay cambios físicos y mentales , tengo dos personitas que ahora dependen de como yo esté,  trato que las cosas de mi pasado y las actitudes de su padre no me afecten pero siempre hay algo que logra hacerlo. 

Lavo mis dientes dispuesta a ir a la cama, ya es muy tarde y quien dijo que vendría no lo hizo.

No voy a esperar cual esposa abnegada porque para nada somos eso, muy su problema si quiere o no venir, no lo necesito.

Mi pijama de perry el ornitorrinco me quedó genial, ¿Es un poco inmaduro? Lo es, pero no me importa, me gusta y ya.

Busco mi otra pantufla ya que solo una está en mi habitación. Lía tiene la costumbre de usarlas y luego las deja tiradas en cualquier lugar de la casa.

Le he dicho muchas veces pero de igual manera es inevitable que haga caso. No me enojo con ella porque así solía ser yo hace unos años cuando vivíamos juntas e  íbamos a la universidad.

Siento que tengo que saber donde está cada cosa si no no puedo dormir por lo que salgo con la única que tengo en mi mano en busca de la otra por el corredor y la sala. En el pasillo no hay nada y tengo que bajar al primer piso que está a oscuras, enciendo la luz para seguir con mi búsqueda pero no lo encuentro, es como si...

La última vez que la vi fue cuando le preparé el té a Dante hace tres días. Recogí  el par y las puse en mi cuarto pero Lía hace lo mismo siempre. Busco por toda la sala pero nada, así que busco debajo de los muebles. Me agacho frente a la mesita pequeña  y observo bajo el más grande; está abajo de este pero muy en el fondo por lo que pongo mis rodillas en la alfombra tratando de alcanzarla lo cual es imposible. Estiro un poco más la mano y logro tocarla con los dedos

__ Si me recibes así, vengo más seguido - la voz de Dante me hace levantar rápido y golpear mi cabeza con la mesa que no recordaba estaba tan cerca. El golpe me deja un poco aturdida, olvido la pantufla y llevo mis manos a la parte afectada apretando mis ojos

¡Carajo! Duele

__ ¿Estás bien? - sus brazos me rodean y lo dejo hacer cuando me lleva a sentarme - ¿Te duele mucho, rubia?

Soba la zona en la que me golpeé y no pongo objeción. Sumo otra vergüenza frente a él

¿Porque con él hago toda clase de tonterías? Podría ser con Lía, con Nadya o hasta mi jefe, pero no, tiene que ser con el bipolar este. Me trata bien un rato y después está enojado quien sabe porqué.

__ ¿Como entraste? - pregunto de un momento a otro

__ La puerta estaba abierta cuando quise tocar - dice señalando el sitio y en efecto está abierta - ¿Siempre duermes así?

__ Claro que no, quizá Lía la dejo así

__ Deberías tener más cuidado la próxima vez - aconseja - ¿Tienes pareja? ¿Novio? ¿Pretendiente?

__ Ninguno ¿Porque preguntas?

__ Por el tipo que vino ayer antes de irme - se sienta en el mueble frente a mí

__ No sé a quien te refieres - digo confundida acariciando la parte golpeada

__ No es importante, te traje unas cosas - levanta la bolsa que no había visto a un lado del sillón - Esta mañana cuando me recibiste con...

Hace ademanes con su mano señalando mi ropa y ¡oh por Dios! De nuevo estoy con estas tontas pijamas que no cubren nada, se suma a mis actos vergonzosos.

Mobster Librarian (Libro 1 Dinastía Indestructible) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora