Humano [ONEUS; ⏸]

21. El pasado de Keonhee

[Flashback]

Lee odiaba la escuela porque le hacían bullying, pero no era capaz de decirle a nadie por la amenaza “si le dices a alguien te irá peor”, por lo que siempre intentaba poner excusas para no asistir, a pesar de eso su madre lo obligaba a ir, si no lo hacía lo regañaba y lo nalgueaba.

Tampoco era capaz de saltarse las clases, porque sabía que llamarían a sus padres y eso sería un problema mayor. Así que se preparaba para ir a la escuela, su madre lo dejaba en la entrada y él se dirigía a su salón, volteaba a todos lados desde que llegaba solo para darse cuenta de que el grupo que le hacía bullying no faltaba.

Salió temeroso del aula viendo a todos los extremos, comenzó a correr cuando sintió que estaba cerca de la cantina, pero el bully se interpuso en su camino mientras le sonreía con diversión.

— Amigo, ¿Por qué luces tan asustado? Los demás pensaran que te molestamos — Dijo colocando su brazo alrededor de los hombros del pelinegro.

Lee bajó la mirada, caminó junto a los tres chicos sin protestar. Primero le quitaron su dinero y después comenzaron a golpearlo, cuando cayó al suelo lo patearon mientras se cubría el estómago por instinto. Gotas saladas salían de sus ojos debido al dolor de los golpes que se le inflingían. Odiaba todo eso, pero no se defendía.

— ¿Por qué no te metes con alguien de tu tamaño? — Escuchó una fuerte voz, por lo que levantó la mirada encontrándose con la espalda de otro chico que lo cubría.

— No te metas en lo que no te interesa — Dijo el bully arrojando al chico a un lado, pero este volvió a interponerse.

— No te tengo miedo, pedazo de basura.

El bully se molestó por la declaración y su puño impactó con fuerza en el rostro del chico que lo defendía, pero él a diferencia de Keonhee, le regresó el golpe con igual fuerza. Los otros dos bullys iban a ayudar a su amigo, pero otro chico apareció.

— Si no se detienen llamaré al director — Informó el castaño frunciendo la nariz.

Los tres bullys se fueron de ahí molestos, el chico que lo había defendido sonrió y corrió para abrazar al contrario, su abrazo fue correspondido por el castaño.

— Woongie, gracias — La sonrisa en el rostro del otro pelinegro era enorme.

— Young, ¿Cuándo dejarás de meterte en problemas?

— No podía quedarme quieto viendo que lo molestaban — Explicó el mayor viendo a Keonhee, que aún seguía en el suelo y lo ayudó a que se levantara.

— Llevemoslo a la enfermería — Propuso el otro chico, a lo que el contrario asintió.

Lee se negó a ir porque sabía que en la enfermería se darían cuenta de todos los hematomas en su cuerpo y muchos de ellos eran de color morado casi negro. Jo intentó convencerlo, pero no lo consiguió. Además, sabía que ellos dos no estarían siempre para defenderlo, por lo que temía por lo que le pasaría después de eso.

— No tienes nada que temer, ellos no van a volver a molestarte porque nosotros estaremos siempre de tu lado — Kim lo abrazó por los hombros mientras que le regalaba un sonrisa amable.

— D-debo volver a mi salón — Habló el pelinegro menor quitando el brazo ajeno de sus hombros.

— Te acompaño — Dijo el mayor de ellos, entonces los dos contrarios caminaron con él hasta su aula. — Por cierto, somos Kim Young Jo y Yeo Hwanwoong — Presentó a ambos cuando llegaron al lugar.

— Soy Lee Keonhee — Mencionó en voz baja y siendo tímido. Al sonar la campana, los dos chicos se despidieron de él y se fueron a su salón correspondiente.