Humano [ONEUS; ⏸]

26. A mitad del camino

Había pasado poco tiempo en la tierra en comparación al otro planeta. Young Jo le ofreció al pelinaranja que viviera con él, en su departamento, Seoho no estaba seguro de ello, pero aceptó sin protestar.

Hwan y Sana se despidieron de ellos, ya que debían seguir trabajando en todo lo que habían dejado pendiente y debían de contactar a Mingi para finalizar la medicina para retrasar el tiempo para Lee.

Ambos restantes tomaron sus cosas y se dirigieron al departamento en silencio, lo más que deseaban en ese momento era descansar de todo lo que había sucedido. Sin embargo, se sorprendieron al llegar al lugar, puesto que Suyun estaría viviendo con ellos también. La menor sonrió al ver a Seoho y corrió para abrazarlo.

— ‹Aún no me olvido de ti, sólo que estaba muy ocupada con la escuela y no había podido visitarte› — Explicó la menor.

— ¿Qué estás haciendo aquí? — Young no estaba cómodo con la presencia de su hermana en ese momento. — Deberías de avisarme si vas a venir — Sentenció.

— Mamá te estuvo llamando un millón de veces y nunca respondiste, por lo que me dijo que te avisara cuando ya estuviera aquí. Viviré contigo, ya que me quedará más cerca la universidad — Respondió la chica inflando las mejillas.

El teñido reviso su celular, en efecto su madre lo había estado llamando, pero su hermana había exagerado en el número; aunque de todas formas, no estaba feliz con que su hermana estuviera viviendo con ellos, sería incómodo que descubriera que Seoho no era humano e incluso lo que “había” entre ellos.

Sin embargo, no podía negarse a que su hermana viviera ahí, así que le mostró la habitación en la que se podía quedar y la ayudó a llevar su maleta. Por otro lado, le indicó a Seoho que tendrían que compartir habitación, el menor no estaba cómodo con eso, porque no le quedaban muchas de las pastillas para controlarse.

— Puedo ir a vivir con Sana o Hwan, pero no podemos compartir habitación por mis feromonas — Susurró el pelinaranja, ya que Suyun creía que era sordomudo.

— Estás tomando el medicamento que hicieron ellos, ¿Cuál es el problema? — El mayor también susurró, a lo que Seoho le mostró cuántas le quedaban. — Está bien, le llamaré a Woong para que te reciba en su casa — Sacó su celular y lo llamó.

La menor salió de su habitación después de acomodar sus cosas, se acercó a Lee para pedirle ayuda con el lenguaje de señas que había aprendido, sólo alguien que lo supiera podría corregirla.

— ‹Oppa, quiero invitarte a una cita› — La menor sonrió con timidez, porque aunque no se trataría sólo de una cita esperaba poder conocer más a Seoho.

— ¿Qué haces? — Cuestionó Jo haciendo los mismo movimientos con las manos que su hermana y la chica sonrió orgullosa dispuesta a presumirle al mayor.

— Me inscribí en clases de lengua de señas para comunicarme con Seoho — Respondió e hizo una V con sus dedos.

— De todas maneras, aún eres muy joven para pensar en salir con alguien — Habló como el hermano mayor que era, aunque la realidad era que podía salir con el chico que ella quisiera menos con Seoho.

— ¡Oh, por favor! No me vengas con ese discurso de hermano mayor. Hyunwoo es menor que yo y tiene novio — Alegó la chica alzando una ceja.

— Eres mi única hermana y mi deber es protegerte, ¿comprendes eso?

Seoho solo observaba como los hermanos discutían, le habría gustado darle la razón al teñido, solo que se mantuvo al margen porque no le correspondía; además debía de seguir con su papel de sordomudo, eso era todo un dilema y volvía las cosas más complicadas que en un principio, cuando no sabía nada del idioma.