Happily ever after | Eren

032.

❝Viaje❞

Eran alrededor de las 10:00 a.m en donde se me había ido el sueño, ya que había sentido unas pequeñas pisadas alrededor de la casa y sabían que eran mis hijos.

Me levante en donde los vi como estaban buscando algo para comer, me acerque a lo cual pegaron un brinco ambos.

—Así que ustedes son los que se comen mis galletas favoritas.—levante una ceja.

—No mami, bueno si, tal vez .—rio nervioso Einar.

—Mami queríamos probarlas.—habló alegre Kaira.

—Bueno coman, les tibiare leche para que tomen.—

Mientras calentaba leche para los niños, Mikasa se levantó en donde se notaba que no entendía que estaba pasando.

—Buenos días ___ y niños.—

—Buenos días tía.—hablaron al insomnio y sonrieron.

—Buenos días Mikasa.—sonreí.

—¿Que pasó ayer, como llegue a tu casa?.—

—Ayer tomaste demás junto con tu hermano.—dije en referencia a Eren.

—No puede ser. ¿No dije algo tonto no?.—estaba muerta de la vergüenza.

—No tranquila junto te salve en varias ocasiones, pero si le decías a Jean que cuando iba a ver anillo en tu mano.—río.

—No puede ser.—puso su mano en su rostro.—Y Jean y Eren.—

—Bueno ellos....—

No alcancé a terminar al escuchar unos gritos.

Pov: Eren.

Eran aún temprano para levantarse en donde comencé abrazar a ___ que estaba a mi lado durmiendo.

Empecé a despertarme poco a poco en donde iba a despertar a ___, aún estaba un poco con sueño por lo que no podía ver mucho, además de la oscuridad de la pieza.

—Amor ya despierta.—toque su cabello.

Se lo había cortado el pelo en que momento, tal vez anoche decidió, después le preguntaría.

Vi como el cuerpo de ella se empezó a mover en la cama en donde estaba enfrente mío y desperté bien en donde me fijé quien era.

Era Jean!!!, lo primero que hice es ver como su rostro estaba cerca del mío y él también despertaba.

Ambos nos asustamos en donde gritamos, molesto por que no era ___, donde estaba.
¿Por que estaba Jean en mi cama?

—¡Que haces aquí cara de caballo!—

—Auch tonto, no lo sé yo solo recuerdo que te dejé acostado en tu cama nada más.—

Escuche unas risas que venían desde afuera, ella sabia de lo qué pasó anoche, me levante de la cama en donde abrí la puerta y ví a ambas azabaches tomando desayuno junto a mis hijos riéndose.

—Buenos días bonito.—sonrió.

La tome de la cintura frunciendo el seño, por que no estaba en la cama ella y estuvo el cara de caballo.