JIANG KE (+18)

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Jiang Ke no había ido a la escuela durante unos días, así que cuando entró en el campus, estaba un poco asustado, temiendo ser reprendido por los profesores. Afortunadamente, su sentido de la existencia era muy bajo y solo su compañero de cuarto le saludó superficialmente, tras una respuesta apresurada, se acostó en la cama y sacó su móvil y puso "Esposo" en uno de sus contactos. Luego se levantó de la cama y recogió sus cosas para ir a clase.

El horario para los del último curso era más relajado, por lo que el día fue aburrido. Por primera vez, Jiang Ke no pudo concentrarse en sus estudios, sólo podía pensar en el hombre, en sus sonrisas, en sus besos, en sus abrazos, en la sensación cuando entraba en él y en la fuerza de sus embestidas.

El agujero fue torturado por los recuerdos y líquido lascivo empezó a empapar su ropa interior, Jiang Ke no se atrevió a moverse, sólo pudo apretar las piernas para dar a su agujero un poco de estimulación. Obviamente acaba de salir de los brazos del hombre en la mañana, pero sintió que había pasado mucho tiempo.

El teléfono vibró en el bolsillo de su camisa, Jiang Ke lo sacó y vio que el identificador era el hombre, se emocionó tanto que el móvil se le escapó de la mano y cayó al suelo. El móvil seguía siendo el que compró tras trabajar después de los exámenes de ingreso, originalmente era muy resistente, por lo que ahora directamente se bloqueó.

A mitad de la clase, ya no estaba de humor, así que recogió sus cosas y se dirigió a su dormitorio, con la cabeza baja durante el camino, muy deprimido. Y cuando tropezó con alguien, estaba pensando en la mala suerte que había tenido hoy, pero al levantar la vista y ver los ojos amables y sonrientes del hombre, casi se levantó de un salto y se lanzó a sus brazos.

"¿Por qué estás aquí? Al terminar la llamada mi teléfono se bloqueó, me estaba preguntando cómo contactar contigo".

Si el compañero de habitación de Jiang Ke hubiera visto esta escena, se le habría caído la mandíbula de la sorpresa. Los ojos de Jiang Ke brillaban como estrellas, sus manos se agarraban a los brazos del hombre, todo su cuerpo estaba lleno de vitalidad.

"Ayer, cuando usé tu móvil para guardar mi número, quise darte uno nuevo, justo a tiempo, el viejo está roto y el nuevo está aquí". El hombre sacó el móvil y se lo entregó a Jiang Ke, un modelo igual que el que usaba.

Jiang Ke apretó el móvil, sus ojos desbordaban cariño: "Gracias, me gusta mucho".

Jiang Ke enterró su cabeza en el pecho del hombre, sus manos rodearon la cintura, y cuando volvió a levantar la vista, sus ojos estaban rojos y las lágrimas brotaban de ellos.

El hombre sostuvo la cara de Jiang Ke y frotó los pulgares sobre su boca una y otra vez, un beso se posó suavemente en los ojos de Jiang Ke, haciéndole cosquillas, y las largas pestañas de Jiang Ke temblaron incesantemente, haciendo que el hombre se acalorara más de la cuenta.

El hombre siguió a Jiang Ke hasta su dormitorio y, nada más entrar, le empujó contra la pared y le besó profundamente, su lengua se abrió paso hasta el principio de la garganta de Jiang Ke, intentando llegar hasta lo más profundo. El pasillo estaba lleno de ruido y personas, pero a los dos no les importaba nada, uno queriendo entregarse y el otro queriendo comérselo.

La ropa interior de Jiang Ke ya estaban empapadas mientras la mano del hombre se deslizó sobre sus pantalones, sintió un calor mientras su trasero cambiaba de forma en la mano del hombre.

La boca de Jiang Ke estaba en carne viva por el mordisco del hombre, gimió tratando de escapar, pero sus manos estaban envueltas alrededor de la cintura del hombre, su delgada cintura se retorcía, los extremos de sus ojos brillaban rojizos, su boca brillaba con agua y cada parte de él exudaba lujuria. Como una concha que intenta desesperadamente mostrarse, abriendo activamente su duro caparazón para revelar la suavidad de su interior.