CULPABLE

Tócate, siénteme

Nueva York, 22:00h. ¿Qué hace una turista en la gran manzana un viernes por la noche sin amigos? Podría ir simplemente a un pub y pegarme la borrachera del siglo. Podría ir a explorar la ciudad por la noche. Si, podría hacer muchas cosas en verdad, sin embargo aquí estoy, sola en una habitación de hotel sin amigos con los que hablar por la diferencia horaria. Me aburro, no lo niego.
Estaba viendo una película mientras me comía una bolsa de palomitas más grande que mi cabeza. De repente, apareció una escena de unas chicas follando por primera vez y, además de ternura, me puso cachonda en un segundo. No me gusta ver porno y la escena la había visto tantas veces que ya me la sabía de memoria. Sin embargo, esa noche no sé qué se me pasó por la cabeza pero abrí una pestaña nueva en google y me metí en una pagina web que me había recomendado mi mejor amiga: 'Tócate, siénteme'. La verdad es que me pareció curioso el nombre. Abro la página y resultó ser uno de esos sitios donde haces una videollamada con alguien y os masturbais mientras os imaginais que estáis follandoos. Increible. Nunca había hecho algo así pero me dije: chica estas en Nueva York, sola en una habitación de hotel, es tu momento. Y así fue y ¡qué momento!
Pinché en la pestaña de mujeres y decidí escoger a una chica llamada Lucy. Rubia, cuerpo de Kendall Jenner, el típico prototipo de belleza establecido por esta sociedad de mierda pero que a mi esa noche me llamó la atención. Llamé.
Lucy: Hola guapa. Bienvenida al paraiso, soy Lucy pero esta noche puedo ser quien tú quieras.
Yo me sonrojé. Ella iba con un bikini negro, de estos que la parte de arriba es dos tallas más pequeña que la tuya y la braga es una tira fina de tela que cubre entre poco y nada, aunque llevaba una bata blanca, curioso conjunto.
Lucy: ¿cómo te llamo, guapa?
Yo: llamame...Betty
Spoiler: no me llamaba Betty pero me daba cosa decirle mi nombre real.
Lucy: bien Betty, ¿es tú primera vez?
Betty: si...
Lucy: ya veo...¿que te gusta?
Betty: no se...
Lucy: eres dificil eh...me gusta
Me rio, es una risa nerviosa de "no sé en qué momento decidí que esto era buena idea". De repente algo en mi se apoderó.
Betty: quiero sentirte mia, hazme tuya.
Lucy sonrió y empezó a quitarse lentamente la bata blanca. Estaba de espaldas asi que pude ver a la perfección su perfecto culo. Su cuerpo parecia esculpido por los dioses y mi temperatura corporal por el mismisimo diablo.
Betty: más...
Lucy: Betty, para ser nueva lo llevas muy bien. Venga, dejame ver lo tuyo.
Betty: lo...¿lo mio?
Lucy: si, quiero ver tu cuerpo, quiero ver tu intimidad, tu sexo, tu todo.
Alejé el portatil de forma que me veía entera. Yo sentada en la cama. Lucy se puso de rodillas en la suya y empezó a bajarse el tirante del bikini lentamente mientras miraba fijamente a la cámara. Era muy sexy. Notaba como me empezaba a mojar y cómo me palpitaba el coño.
Lucy: imaginate que estoy ahi. Poco a poco voy dejando besos por tu cuello, voy bajando...lentamente...
Se quita la parte de arriba del todo, de forma que puedo ver sus pechos a la perfección, eran perfectos como ella.
Betty: Dios
Lucy: Betty, tus pechos, quiero verlos...
Me quito la camiseta del pijama y dejo al aire mis tetas. No eran tan perfectas pero las queria.
Lucy: mmmm...que pechos más bonitos y sabrosos....Cómo me gustaría masajearlos...chuparlos...lamerlos...sentirlos mios, dentro de mi boca...imaginatelo....
No sé por qué pero me puse muy muy cachonda y me mordí el labio.
Betty: no pares...
Cerré los ojos y me imaginé la escena.
Lucy: tus pechos son deliciosos Betty...Dios Betty...Betty...me pones muy perra....Betty...
Lucy decía mi nombre entre gemidos y eso hizo que me pusiera aún más cachonda.
Betty: Lucy....no pares...quiero ser tu perra...¡desnudate para mi!
Así hizo, se desnudó del todo y yo hice lo mismo. Ambas nos estabamos viendo al completo.
Lucy: Betty, abrete de piernas. Quiero verlo todo.
Betty: ¿qu...qué?
Lucy: Dejame verte tu coñito, dejame sentirlo.
Me apollé en el respaldo de la cama y me abrí de piernas.
Lucy: Dios Betty, que rico se siente.
Tocate para mi.
Lucy se abrió también de piernas. Yo no aguantaba más y me empecé a masajear mi coño. Primero lentamente de arriba a abajo. Después empecé a hacer círculos en mi clítoris, lento. Gemía.
Lucy: más rapido, cariño.
Aumente la velocidad. Mi coño chapoteaba y sonaba muy mojado. Miré a la pantalla y vi que Lucy se estaba masturbando viéndome
Betty: Lucy...dejame oir....oir tu chapoteo...Lucy...aaaah....
Lucy acercó la cámara e hizo un primer plano de su coño. Escuchaba y veía cómo se masturbaba, cómo sus líquidos salian de ahí abajo.
Lucy: Betty....aaaah....Betty...Soy toda tuya, soy tu perra y tú eres mi perra... ponte a cuatro...
Me puse a cuatro de forma que le daba un primer plano de mi culo y coño a Lucy. Me agaché un poco para poder verla mejor y ví que ella estaba de pie en la cama masturbándose.
Betty: Lucy....si...si...siiii...
Me penetre tres dedos de golpe y con la otra mano me masajee el clítoris con rapidez. No podía parar de gemir mientras escuchaba a Lucy.
Lucy: Betty....ya...ya llego....Dios...si...aaaaah
Lucy se sentó, abrió sus piernas de par en par y se masajéo el clítoris de tal forma que de repente: squirting. Todo su líquido directo a la camara, directo a mi. Sus gemidos, sus retrocijos, su liquido. Todo era mio.
Betty: siisisisisisi...Lucy...ya...
Llegué a tener el mejor orgasmo de mi vida y además me provocó el squirt, cosa que nunca nadie había conseguido antes.
Lucy: Betty, ha sido....¡wow!
Betty: Lucy...dios...Lucy eres increible.
Lucy: Tú lo eres. Ha sido todo un placer, guapa. Hasta la próxima.
Colgó. Colgó y yo me quedé ahí tirada en una cama mojada por mis líquidos, intentando recuperar la velocidad normal de mi respiración. Había sido increible.