CULPABLE

Que no nos pillen (pt. 1)

14 de febrero, día de San Valentín, día en el que mi padre y su novia Emma se van juntitos a celebrar que se quieren y a disimular que no discuten cada día de la semana.
Emma: ¡Betty! ¡ven un momento!
Llego a su habitación y me la encuentro de espaldas con un vestido rojo corto que le quedaba bastante bien. Me pide que le cierre la cremallera y, cuando mis manos rozan su espalda, noto como su piel se pone de gallina.
Emma: ¿te gusta?
Yo: estás muy guapa, Emma.
Sonríe y me pide que le baje la cremallera para después quitarse el vestido y quedarse en ropa interior, o al menos lo que parece ser ropa interior porque simplemente es un tanga rojo lencero y unos parches para tapar los pezones.
Me quedo mirándola. Nunca me había fijado en el cuerpazo que tiene. Se da cuenta.
Emma: ¿te gusta lo que ves?
Yo: ¿qué?
Se ríe y yo me pongo roja.
Emma: tranquila, todas tenemos lo mismo, no me avergüenza que me veas desnuda.
Yo: no, no es eso, solo pensaba en el cuerpazo que tienes.
Sonríe. ¿Por qué habré dicho eso?
Se acerca a mi.
Emma: seguro que tú también tienes un cuerpazo debajo de ese chandal.
Yo: no creas...
Emma: dejame verlo...
Me quedo parada, ¿qué quiere?
Emma: vamos, estás segura aquí. Quítate la ropa, dejame verte entera.
Yo: ¿qué dices?
Emma: ¿me vas a decir que no sientes la tensión sexual entre nosotras ahora mismo? ¿me vas a decir que no estás deseando quitarme este tanga?
Trago saliba.
Emma: vamos, ven.
Nos sentamos en la cama y ella empieza a acariciar mi cuerpo hasta llegar a mi pantalón. Me mira, le sonrío timidamente y mete su mano dentro del pantalón para después empezar a tocar mi zona íntima por encima de la braga.
Yo: esto no está bien, sales con mi padre...
Emma: tu padre no está aquí ahora, disfrutalo mientras podamos.
Abro un poco más mis piernas para que le sea más facil tocarme. Me toca suavemente pero poco a poco va aumentando la velocidad, sobre todo en la zona del clítoris. Arriba, abajo, izquierda, derecha. Mi respiración comienza a agitarse y mis gemidos a sonar, aunque intento no gemir muy alto porque mi padre está en la casa.
De repente llaman a la puerta y Emma me hace esconderme detrás de la cama. Era mi padre.
Papá: cariño, ¿te falta mucho?
Emma: dame quince minutos.
Mi padre se va. Yo me levanto y me iba a ir pero Emma me coge de la mano y comienza a bajar mis pantalones y bragas. Después se arrodilla y comienza a lamer mi coño mojado. Yo empiezo a perder fuerza en las piernas pero no quiero que pare. Agarro su cabeza para que vaya más rápido, me estremezco y gimo hasta que me corro en su boca.
Emma: ¿te ha gustado?
Yo: si...quiero más...
Emma sonríe. Ambas nos desnudamos al completo. La tiro a la cama y, comi no había mucho tiempo que perder, me coloco sobre ella y empiezo a rozar mi clítoris con el suyo en forma de tijera. Poco a poco aumentamos la velocidad, el roce nos hace gozar como si no hubiese un mañana y Emma agarra uno de mis pechos por el placer. Gemimos, intentamos controlar nuestros gemidos. Nuestros coños chapotean de lo mojados que están.
Vuelven a llamar a la puerta. Paramos pero no entran.
Papá: cariño, ¿estás bien?
La empujo contra la cama, le abro de piernas y empiezo a comerle el coño.
Emma: per...perfectamente amorrr...Ya...ya...ya salgo..sii...
Papá: ¿seguro que estás bien? Suenas rara.
Combino mi lengua con mis dedos y, mientras juego con su clítoris, empiezo a penetrarle tres de mis dedos. Se estremece y no aguanta mucho.
Emma: sii...sii..siii...estoy...estoy muuuuuy bien...
Papá: ¿quieres que pase?
Emma: no...no...tran...tranquiloooo...dios sii....
Yo sonrío cuando mi padre se va y Emma se corre en mi boca.
Emma: yo te mato.
Sonríe y ahora es ella la que está encima mío. Volvemos a hacer la tijera. Rozamos nuestros coños muy muy mojados con gran pasión.
Yo: oh dios...oh dios...si...si...siii...
Emma: ¿te gusta eh? sii...te gusta que tu futura madrastra te de duro...eee...siii...siii...aaah...aahhhh....aahhhh...dioss...
Yo: me...me encanta...siii...siii...siii...aaah aaah... no pares...no paressss....
Aumentamos más y más la velocidad hasta que de pronto squirt. Nos empapamos las dos de nuestros líquidos pero no nos detenemos. Ella se recoloca encima y empieza a rozar su coño con mi pecho hasta llegar a mi boca. Le como el coño como nunca antes se lo han comido. Ella, mientras tanto, me masturba con pasión hasta que no aguanta más y se gira formando un rico 69.
Papá: cariño, en cinco minutos llega el taxi.
Emma: vale...ya...ya vooy...
Nos sentamos una frente a la otra. Entrelazamos nuestras piernas como koalas y Emma empieza a hacer movimientos con su cadera como si me estuviese penetrando. Nos besamos y abrazamos. Después, nos tumbamos y, mientras seguimos abrazadas, Emma sigue haciendo dichos movimientos que a mi me ponen tanto.
Emma: me encantan las tijeras contigo...sentir tu coño mojado con el mio...sentir tu respiración agitada...dioss...si...me pones mala...
Sonrío y de jn movimiento la coloco debajo de mi. Me siento de lateral y empiezo a mover mi coño junto al suyo a gran velocidad. Tanto es así que llegamos al orgasmo rápido y a la vez.
Yo: sii...sii...sii...dios dios dioosss....me...me corro...Emmaaa...
Emma: siii...me corro....di...di mi nombre...diloooo....siii...
Yo: Emma...Emma...Emmaaaa...aaah sii...Emma....no...no puedo más...me corro... aaaaahh....
Nos corremos y caemos rendidas en la cama.
Papá: cariño, nos tenemos que ir. ¿Estás lista? Voy a entrar.
Noto el pánico en su cara. Yo me escondo debajo de la cama y ella se viste como puede.
Papá: estás preciosa, ¿vamos?
Emma: cojo el bolso y vamos.
Emma se agacha, me lanza el tanga usado, el cual huele y sabe a ella. Se van y, nada más les oigo cerrar la puerta, me tumbo en su cama, grabo con mi móvil y empiezo a masturbarme con el tanga. Después, le envío el vídeo.
Al rato, justo cuando iba a irme a dormir, recibo una notificación. Emma me había mandado un vídeo de ella tocandose debajo de la mesa con mi padre enfrente y otro de ella masturbándose en el baño del restaurante.
Me pone tanto esta mujer.