Sentimientos ocultos

Capitulo 15.

Débil...

Así es como me convierte Mackenzie Bradley.

Siento como mi cuerpo se debilita, mi respiración es entrecortada, tengo que parpadear un par de veces para entender que esto que esta pasando es real, que ella esta aquí, conmigo. Siempre había pensado en esta escena antes de dormir y jamas crei que se haría realidad. Siento que estoy en una dimensión alterna en la que las cosas me están saliendo bien por primera vez. Siento que tengo todo lo que había querido porque ella esta aquí.

Ella era todo lo que siempre había querido.

Cuando me doy cuenta de que no estoy alucinando, la aprieto mas hacia mi y la beso con mas fuerza, con mas pasión. El roce de sus labios con los míos se sienten tan jodidamente bien al igual que la primera vez que la bese. Sus labios son tan suaves y húmedos que creo que podría hacerme adicto a ellos si no es que ya lo soy. Ella aprieta mi camiseta para acercarme mas hacia ella. Probablemente mi camiseta quede arrugada después de esto, pero eso me importa una mierda.

Ella esta aquí y eso es lo que me importa.

Ella rompe el beso y se separa de mi, me siento extraño al no sentir su pequeño cuerpo cerca del mío. No quiero abrir los ojos. Tengo miedo de que se vaya como la ultima vez y que me deje con el corazón en la mano.

En realidad, toda esta situación es aterrorizante.

La miro y caigo en cuenta de que esta con la mirada al suelo, avergonzada.

-Lo siento mucho Blake.-Me dice, mirándome y juro que se me va a salir el corazón al verla en ese estado. Lagrimas brotan por sus suaves mejillas y ella se tapa la cara con sus manos. -Se que estas molesto conmigo y de verdad lo siento, lo que te hice fue horrible y entiendo que no me hayas dirigido ni la palabra.

Me acerco nuevamente a ella y la rodeo con los brazos, ella se acerca a mi y comienza a llorar en mi pecho. Tomo su mentón y limpio sus lagrimas con mis manos, después la miro directamente a los ojos.

-Hey, esta todo en orden.-La tranquilizo.-Yo no puedo ignorarte por tres años y a la semana exigirte una respuesta.-Me encojo de hombros.-Así que no es tu culpa, no tengo nada de que disculparte.

Aunque muy en el fondo aun me sienta un poco dolido por lo que hizo y su manera de responderme, no la culpo. Todos la hemos cagado y lo que le dije era cierto. Hace unos meses no podía ni hablar con ella y hace una semana voy y la beso exigiéndole que este conmigo, se que tampoco es muy justo de mi parte. Creo que normalmente estoy acostumbrado a que todas las chicas me digan que si al instante, pero se que con Mackenzie todo es diferente. A ella no le interesa lo superficial, ella es fan de los hechos y las cosas románticas y es una parte de mi que por alguna extraña razón solo me sale con ella.

Ella me sonríe con tristeza. -Aun así, creo que debí enfrentarte. Pero si te soy sincera, no quería hacerlo.

-¿Por que? -Junto las cejas.

Ella se talla los ojos y suspira.-Porque no sabia mi respuesta, Blake.-confiesa, frustrada.-Jamás me imagine que tu te fijarías en alguien como yo y de la nada me sueltas que llevas enamorado de mi desde séptimo grado.

-Nunca fue mi intención que te enteraras.-Respondo.-Siempre creí que eras algo pasajero, pero nunca lo fuiste, siempre haz estado aquí.-Tomo su mano y señalo mi corazón.

Ella sonríe y me contagia su sonrisa, esto se siente tan bien.-Y...¿Por que nunca te animaste a hablarme? Estoy segura de que si me hubieras invitado a salir te hubiese dicho que si.

Porque soy un pendejo, Mack.

Me separo de ella y cierro la puerta de la casa. Creo que es mejor no hablar de esto donde esta un Cedric chismoso que va y le cuenta todo lo que escucha a mis padres. -Sígueme. -Le digo y ella me sigue. Su cara sigue un poco roja por su llanto pero me sigue pareciendo igual de bonita y tierna que siempre.