30. Como Grace y Jaxon en el Katmere

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Jayden Quest

Me miro en el espejo del baño intentando que el color rojo de mis ojos se vaya, pero es imposible. Aún sigo cabreado, cómo se atreve a golpearla? Mataré a esa dragona. 

-No quiero que lo vuelvas a hacer, entendido? -Malía golpea mi espalda con una toalla.

-Está bien. 

-Mírate, estás lleno de golpes. De verdad, eres un desastre. -la cojo de la cintura para sentarla sobre el lavabo y que me cure. 

Lo hace en silencio, concentrada en lo que hace. 

-Tú también estás herida. -intento agarrar su muñeca, pero no me deja. 

-Ni se te ocurra volver a hacer eso hasta que no descubra como funciona. 

-Absorbo tu dolor para que no tengas que lidiar con todo sola. 

-Y qué haces con el dolor? 

-Nada, desaparece. -mis palabras no la convencen del todo. -Malía, no me quedo con tu dolor, solo desaparece. Es una forma de ayudar a los que queremos. -se queda callada durante un rato, aún está enfadada conmigo. Tengo que solucionar todo esto. 

-Y ahora que va a pasar? No sé cómo acabamos en esa situación. Solo se juntan con los de su misma especie, y no entiendo por qué.

-No te preocupes, después del baile de invierno las cosas se calmarán. 

Miro mi teléfono, un mensaje de Bryson, la directora quiere vernos. A los dos. 

-Tenemos que ir. -dice al darse cuenta de mi intención de quedarnos aquí, en la protección de mi cuarto. -Dame diez minutos para cambiarme, nos vemos allí. -baja del lavabo y se va, antes de cerrar la puerta vuelve a hablar. -Intenta relajarte, no será bueno que te vea con los ojos rojos. 

-Lo intentaré. 

...

-Y bien? Se puede saber qué ha pasado? -pregunta la directora de brazos cruzados. 

-No es evidente? -gruño. -Esa dragona pegó sin ningún motivo a mi compañera. -replico enfadado. 

-Y eso ha ocasionado desestabilidad entre los sobrenaturales? Permíteme dudarlo. -aprieto los puños con fuerza para no hacer algo de lo que pueda arrepentirme más tarde. 

-Directora, lamento lo ocurrido, pero nosotros no hemos hecho nada, el grupo de esa chica llegó a la cafetería y nos empezó a molestar, nosotros solo tratamos de defendernos, pero se fue de las manos. -dice Malía poniendo una mano sobre la mía y bajando la mirada. 

-Entiendo, podéis marchar, pero si vuelve a ocurrir os expulsaré a los dos. 

Los dos nos ponemos en pie y al cruzar la puerta ella no puede evitar reírse. -Qué pasa? 

-Casi explotas. -se limpia lágrimas de risa, al verla así no puedo evitar reírme yo también. -Vamos a cenar, tengo hambre. -caminamos por el pasillo riendo, pero al alzar la vista veo a algunos del grupo de Tami y West venir hacia nosotros. 

Ellos pasan de mí y miran mal a Malía. Paso mi brazo por su hombros para pegarla a mí, eso les recuerda que estoy presente. Al pasar a su lado chocamos nuestros hombros y nos lazamos miradas de odio. 

Malía tira de mi mano para que nos marchemos. Pero al llegar al pasillo principal la cosa empeora, todos nos evitan, nos abren paso asustados y enfadados. 

Aprieto la mano de Malía para que no se sienta mal. Cruzamos la puerta de la cafetería y ella se detiene. 

-Si quieres nos vamos. 

-No, solo tengo que ignorarlo. -seguimos caminando hasta la mesa. Sinceramente espero que esto se calme, necesitamos pasar desapercibidos, no llamar la atención más de lo que ya lo hacíamos. 

Al sentarnos en la mesa nos miramos entre nosotros mientras Malía se tapa la cara, no está cómoda con esto, es obvio. Esto necesita parar enseguida. 

Malía Landford

Han pasado cinco días horribles, la situación está más tensa que antes. Solo hay peleas entre especies, cada vez más peligrosa. Cada vez que camino con los chicos o sola, recibimos miradas y nos abren camino evitando toparse con nosotros. 

Esto es horrible. 

Lo único que mantiene mi mente ocupada es el baile de invierno, esta noche varios grupos de otros internados se reunirán en el RoseMary para celebrar la supuesta paz entre especies. 

No sé qué pensarán al entrar aquí y ver este panorama. 

Ayudo a Tessa con la decoración de la entrada, ella hace crecer plantas alrededor de las barandillas con flores blancas y azules. 

Yo cuelgo adornos navideños de esas plantas. -No pienses más en eso anda. 

-Es difícil no hacerlo. 

-Tú solo céntrate en estar espectacular esta noche. Además, el baile de compañeros será el primero de la noche. -mueve sus cejas arriba y abaja muchas veces. 

-Otra cosa de la que preocuparme, creo que Jayden se piensa que sigo enfadado con él. 

-Por qué lo dices? 

-Siento su arrepentimiento, y no ha parado de regalarme cosas. 

-Eso es bueno, el chaval quiere que estés con él y te está demostrando que puedes confiar en él. 

-Ese es el problema, no hace falta que me demuestre nada. -insisto colgando la última bola azul de la barandilla. Me apoyo en ella viendo la puerta de la entrada. Tessa pasa su brazo sobre mí a modo de abrazo

La puerta se abre y por ella entra un grupo de unos diez adolescentes que no había visto antes, van dirigidos por una señora de pelo morado opaco y vestido del mismo color. -Esos son de NorthPage, están llegando los primeros estudiantes. Algunos nos miran y nos sonríen. 

-Vamos a cambiarnos, no podemos dejar que nos vean así. -Tes tira de mí mientras veo al siguiente grupo entrar, ellos me miran y un escalofrío me recorre el cuerpo. 

Dan miedo. 

The Monster I KnowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora