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Empezamos a caminar de nuevo a la reunión charlando y yo abrazaba cómodamente su brazo.

— No te lo había dicho, pero este lugar no está nada mal.— Alago con elegancia.

— Para mi es un honor, Señor Haddock que usted piense eso.— Le seguí el juego.

— Estoy Feliz por ti, sé que fue dificil y fueron muchas horas en la planeación, pero valieron la pena.

— Gracias Hiccup, no me cansaré de agradecerte.— Lo miré con sinceridad.

— No es nada, My Lady.— Le dió un beso a mi cabeza.

Seguimos caminado, hasta que un dolor en mi vientre me hizo parar en seco y quejarme silenciosamente,  Hiccup se dio cuenta y paró el también.

— ¿Estás bien?— Preguntó alarmado por mi cara de dolor.

— Si, Si tranquilo solo un pequeño cólico no te preucupes.— Me incorporé derecha para volver a caminar.

— ¿Estás segura? ¿No quieres sentarte?.— Insistió.

— No tranquilo, ahora me tomo algo y se me pasa no te preucupes.

— Bien...— aceptó no muy convencido pero aún así seguimos caminando en silencio hasta el lugar.

— Astrid que bueno que apareces.— dijo mi padre al vernos.— Oh, Hiccup te iba preguntar si tu padre vendrá.— Le habló a Hiccup y yo me fui a sentar por el dolor.

— Oh, él tuvo un pequeño viaje de negocios.— Respondió poniendo atención a lo que hacía.

— Comprendo. ¿Astrid hija estas bien?— Preguntó al verme sentada que con cara de dolor para nada disimulada.

— Si papá tranquilo, solo estoy cansada y con un poco de dolor de estomago nada grave.— Lo Tranquilice.

— ¿Te traigo algo?— Me Pregunto Heather, la cual había aparecido al lado mío.

— Un tea esta bien. Gracias.— Le pedí y ella fue a pedirselo a uno de los meseros.

— Hiccup una chica pregunto ahora por ti.— Escuché a mi padre.

— ¿Enserio?— Pregunto Hiccup extrañado e incómodo.

—  Si, estaba preguntando si ya habia hablado contigo y si sabia dónde estabas. Actuaba algo extraño.— Yo Fruncí el ceño al escuchar eso.

— Creo saber quien es, luego la llamo, no hay de que preocuparse.— al momento volvieron a llamar a mi papá y se disculpó. En eso, Hiccup se sentó al lado mío.

— Perdón que pregunte pero ¿Quien era la tal persona?— Lo miré.

— Oh tengo la certeza de que es Camicazi, la dejé sola cuando me vine con tu mamá y con Annie.

— No debe estar muy feliz.— Miré a otro lado con seriedad.

— Parece que no... Oye he pensado en lo que me dijiste de llamarle la atención por su "Comportamiento".

— ¿Enserio? ¿Y que harás?

— Despedirla... es la mejor opción.— Abrí bien los ojos.

— ¿Quien va a despedir a quien?— Preguntó Heather llegando donde nosotros con mi tea y Patan a su lado.

— Voy a despedir a Camicazi.— Respondió Hiccup tomando agua de las botellas de la mesa de al lado de nosotros.

— Al fin primito, porque esa mujer me cae horrible.— se quejó Heather.

— Debo admitirlo esa chica se pasa de querer conquistar.— la siguio Patan.

— Debo hablar con ella, pagarle lo del mes y darle una buena razon que no sea solo que ella me asusta.— Habló con nervios.

— ¿Y ya tienes algún reemplazo?— pregunté concentrada en mi tea.

— Si, la prima de Patapez Mackenzie, necesita un buen empleo y con práctica me ayudara.

— Suena bien...

Estuvimos hablando los cuatro un buen rato y hasta se unieron Tanlos y Stormfly y después de un rato mi dolor fue disminuyendo poco a poco.

Ya eran casi las 2:00 cuándo el buffet hiba a ofrecer un buen menú para el almuerzo era demasiada gente pero aún asi habia buena comida para todos los gustos. Todos nos sentamos al almorzar en mesas asignadas según los acompañantes y no logramos ver por ningún lado a Camicazi, hasta creo que se canso de buscar a Hiccup y de que este no le contestará así que Esperó que haya desaparecido.

Después de almorzar y de terminar de hablar con la gente con la cual no habia hablado empezamos a despedir a todos porque ya todo estaba terminando. Y cuando estaba hablando por teléfono alguien llega donde mi.

— Señorita Astrid, tenemos una problema en la parte de atrás.— Me habló uno de los chicos de la cocina.

— ¿Que clase de problema?— Cuestione con seriedad y atención.

— Mejor vealo por usted Misma.— Me dijo y yo fui directo al lugar y se me unió Heather y Patan.

Fuimos al lugar donde tenían guardada la comida que sobra que era por un callejón y vi todo el lugar con pintura y basura regada por todo el lugar.

— Carajo...— Mormuro Patan.

— ¿Pero que sucedió aquí?—  pregunte alarmada.

— Nosotros estábamos en el lugar que se nos fue asignado y escuchamos varios estruendos y para cuando vimos estaba todo hecho un desastre.

— ¿Pero no tendria que haber alguien aquí?— Preguntó Heather y el hombre nego con la cabeza.

— Todos estábamos ayudando a guardar las cosas.— Respondió y yo me quedé pensativa viendo todo el desastre ¿Quien podría hacer todo esto? Y ¿Para que?.

— Pues que buen servicio.— se quejo Patán y Heather le dio un pisotón.

— Astrid mira.— me llamó Heather señalando una cámara de seguridad.

— Esperemos que aún sirva. Mandare a limpiar este lugar.— Miré al chico.

— Algunos de nosotros podemos limpiar.

— Bien y no se preocupe le pagaré más si hace falta.—dije y el hombre asintió para irse a buscar a más gente, yo encambio fui directo a la cámara de vigilancia haber si se podia ver algo.

— ¿Pero que Pasó en el callejón?— Preguntó mi madre llegando con papá donde nosotros.

— No sabemos aún, iremos a ver si la cámara de vigilancia que hay allí grabo algo.

— Vayan, nosotros nos encargaremos aquí.— Informo Papá y yo asentí.

Llegamos al lugar y le expliqué la situación a la persona encargada y el hombre empezo a buscar en la computadora cuya cámara que gracias a los dioses aún funcionaba. Empezó buscando la hora exacta que creeiamos que había ocurrido el hecho.

Hasta que por fin apareció desde el momento donde, lo que parecía un hombre y una mujer empezaban a botar todas las bolsas de basura y regar toda la pintura en el piso y las paredes.

— ¿Puede acercar la imagen haber si se puede ver quien es?— Pregunté y el celador amplio la imagen dejando ver que el hombre si se habia molestado en taparse bien, mientras la mujer solo se puso una gorra y listo.

— Ella me parece conocida pero no se de donde...— Susurro Heather hasta que mi di cuenta quien era.

Camicazi...— Murmuré y los miré

— Mierda...— Susurro Patán.




Siento que es algo corto...

Estos días no han sido tan lindos en mi vida e intentó escribir algo pero el bloqueo sigue allí y pues la escuela no me deja en paz.

Esperó que les este gustando como vamos y gracias por su apoyo.
Hasta aquí mi reporte <3

𝘊𝘈𝘔𝘐𝘕𝘖𝘚Where stories live. Discover now