𝘊𝘈𝘔𝘐𝘕𝘖𝘚

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eᴘɪʟᴏɢᴏ

FEBRERO/ INVIERNO

𝑻𝒓𝒐𝒎𝒔ø, 𝑵𝒐𝒓𝒖𝒆𝒈𝒂

En una montaña lejos de la sociedad se encontraba una pareja que celebraba sus 6 meses juntos, explorando y tomando fotos de lo que la naturaleza les ofrecía.

Habían decidido hacer ese viaje a finales del invierno para disfrutar las maravillas que 𝑻𝒓𝒐𝒎𝒔ø les ofrecía. Ya llevaban 3 días y justo ese día celebraban esos meses juntos. Habían turistiado y conociendo las bellezas del lugar, hasta que el último lugar sería las montañas y ver así L͎a͎ A͎u͎r͎o͎r͎a͎ B͎o͎r͎e͎a͎l͎ algo con le que soñaban desde hace tiempo.

- ¿Sabias que hace mucho tiempo estas tierras les pertenecía a los Vikingos?- Pregunto Hiccup viendo el acantilado.

- ¿Enserio? ¿Ahora tengo un novio historiador?

- Me gustan esos temas, cuando quieres lo conversamos.

- A mi también me gustan, pero más de como luchaban en esas épocas. Y sí lo podríamos hacer, si no te terminamos pelando como la otra vez.- rieron.

- ¿Qué te parece si comemos ya?- Propuso cambiando de tema, mientras Astrid le tomaba fotos al acantilado.

- Hiccup comimos cuando nos fuimos.

- Eso fue hace dos horas.- Se quejó como niño chiquito y ella rió.

- Bien... ¿Qué quieres comer?- Se sentó en una manta que anteriormente Hiccup había puesto.

- Tenemos frutas, dulces, y... ¿Maruchan?- Sacó el envase con una risa.

- Tenía ganas. No me juzgues.- Desvío la mirada para ver las fotos que había tomado- Nunca me voy a cansar de agradecerte por esta cámara Hiccup.- le sonrió tiernamente.

- Sé lo que te gusta tomar fotografías y que mejor que una cámara.- le acarició la mejilla.

- Pues muchas gracias.- Se acerco para darle un beso pero un polizon los interrumpió saliendo de una cesta- Oh, parece que alguien ya despertó.- Rió y sacó a Chimuelo.

- Trajimos comida para él, ¿no?

- Pues claro y para Garff.- Puso a Chimuelo en sus piernas y lo empezó a acariciar.

- ¿Donde está ese pequeño?- La miró y encogió los hombros y él se paró- ¡Garff!- gritó.

Un pequeño peludito corría hacía ellos con una rama en su boca. Y sí, Hiccup y Astrid habían encontrado a ese pequeño cerca de su apartamento en una de esas frías noches de invierno, lo llevaron al veterinario y no tenía nada malo y podía tener sus 3 meses de edad. Astrid decidió quedarse con él ya que se había apegado mucho al pequeño y parecía que un pequeño ser la había elegido de nuevo.

- ¿Dónde estabas?- Hiccup se inclinó para quitarle la rama pero el no quería- Si la sueltas te damos croquetas.- Astrid agitó el paquete con croquetas y hay mismo solto la rama- Y asi es como se chantajea a un perro.- Habló con orgullo tirando la rama llena de baba y Garff ni cuenta se dió por estar comiendo.

- Si así eres con un perro no me imagino con un bebé.- se burlo Astrid.

- ¿No te acuerdas como chantajeamos a Adam hace unas semanas para que comiera sus vegetales?- Pregunto y ella solo atinó a negar con la cabeza y reír.

Ambos empezaron a comer algunas cosas que tenían en una cesta (Diferente a la que estaba durmiendo Chimuelo) y ver a sus dos "Hijos" (como los catalogaban sus amigos) comer alegremente. Al principio Garff perseguía a Chimuelo o a cualquier otro animal cercano pero aprendió a no perseguirlos tanto.