~INCOMODO~

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El regreso a Hogwarts iba a ser muy incomodo para muchos.

En especial para Harry quien no tenia la intención minima de regresar.
Despues de tal cortante e incomodo encuentro con Dumbledore en el juicio, le había dejado en claro que ahora era considerado un marginado.
Y tal vez muchos en el colegio de magia empezarian a pensar lo mismo, tal vez creyendole un engreido o incluso un busca problemas con deseos incansables de ser siempre el centro de atención.

Por tal razon Harry solia pasar todas las mañanas con mal humor, encerrarse en su habitación o simplemente pasar por alto las miradas curiosas y preocupantes de Sirius. Solia incluso perderse el desayuno con el unico motivo de evitar alguna conversación, y cada vez que se mencionaba la idea de regresar al callejon diagon para comprar nuevas cosas que le servirian en su regreso al colegio, el aludido solo negaba y murmuraba que podria ir solo.

Era un comportamiento que se estaba convirtiendo en una costumbre muy incomoda e incluso frustrante entre los miembros que vivian en la vieja casa de los Black.

—Si hay algo que te este causando incomodidad. Debes mencionarlo—comento Sirius una noche perdiendo ya paciencia de siempre ser ignorado por su ahijado. 

—Deje de ser un niño hace mucho. Además nunca necesite de alguien que me ayudara—le respondio Harry manteniendo su mirada en un punto desconocido de la sala.

El azabache se encontraba sentado en el sofa antiguo de los Black. Situado en medio de la sala enfrente de una libreria llena de libros antiguos y desgastados.

Sirius que había estado dandose cuenta del cambio de actitud de su ahijado, supo que todo se creo desde el recreso del jusgado sobre el uso inadecuado de magia.

—Entiendo tu fastidio.

—No lo entiendes—comento Harry con voz neutra sin seguir levantando la mirada.

—Si es por Dumbledore. Su comportamiento no solo es contigo. Ha estado comportandose muy raro en los ultimos dias. Además el solo esta algo frustrado, no quiere que estes en peligro. Nadie lo desea, ya has estado pasando por mucho.

—¿Y porque ayudarme? Debio dejar que me rompieran la varita, entonces ahi me quedaria encerrado. Sin magia.. sin peligro.

Sirius resoplo cansado.
Y se paso las manos por el cabello, una señal de que iba perdiendo poco a poco la poca  paciencia que aun mantenia.

—Y piensas lo mismo—continuo hablando Harry—. Tu tambien piensas que es mejor. Que debo quedarme aqui.

—Claro que no. Tu regresaras a Hogwarts. Terminaras y puede que sea complicado pero no tienes de otra.

El azabache levanto la mirada y observo como su padrino tenia el ceño fruncido.
No queria ser una molestia. Vivir con el era lo mejor que le estaba pasando despues de varios años, no estar pasando vacaciones en casa de sus tios Muggles era el mejor regalo que podia estar recibiendo.

Si bien se sentia fastidiado y algo confundido por el comportamiento del viejo director, no podia evitar estar más agradecido con el por dejar que pasara la mayor parte de las vacaciones con su padrino. Que si bien solo llevaba pocos años conociendolo, significaba mucho mas que toda su vida miserable con sus tios.

—De acuerdo—suspiro Harry e intento mostrarse relajado. Buscando que su padrino olvidara su comportamiento de las ultimas semanas—. Ire mañana al callejon diagon. Solo necesito pocas cosas. Lo unico que debo cambiar son los libros, la tunica, los ingredientes  para pociones..

—Considero que no debes ir solo.

—¿No confias en mi?

Sirius lo que menos queria en ese momento era empezar un confrontamiento entre ambos.
No conocia con mucho detalle la personalidad de su ahijado. Pero teniendo de referencia a Lily y James, preferia no ponerlo a prueba.

—Confio en ti—le dijo—. Pero no iras mañana. Espera la nueva lista de Hogwarts. Entonces iras.

Harry asintio despacio.

—Otro asunto más—comento Sirius y suspiro sentandose al costado de su ahijado—. Necesitamos hablar de ti. Hace semanas me mentiste y ya me entere. No dire quien me conto, pero no soy idiota, lo entendi al instante y supongo que ya sabes a que me refiero.

—Oh... pero eso... ya te dije. Solo solos amigos.

Sirius trato de sentarse comodo, pero no pudo evitar hacer movimientos bruscos con sus brazos.

—Claro que sí. No estoy diciendo lo contrario. Querido ahijado.  Los amigos se pueden... enamorar. ¿no? ... digo. Puede pasar, muchas cosas. Además los amigos no se comportan como tu te comportas con ese rubio.... Harry Solo quiero escucharte y poder tener más claro el tema.

El azabache no pudo evitar sonreir. Sirius intentaba ser un padre con el y agradecia ese intento con todo su corazón. Pero no era sensillo hablar sobre sus gustos con alguien que solo conocia pocos años.

—Ya te dije. Solo amigos.

Sirius sonrio de oreja a oreja. Parecia aterrador y doloroso.

—No hagas eso—le suplico Harry

El animago dejo de sonreir e hizo una mueca como si tratara de pensar o unir muchas piezas en su mente. Buscando la respuesta a una ecuasión muy complicada.

—Bueno... ya me tengo que ir a limpiar mi habitación—le informo Harry y se levanto rapido del sofá.

—¡Ya se!—exclamo Sirius poniendose de pie de un salto.

El azabache lo miro asustado.
—¿Qué sabes?

—Algo.

Harry entrecerro los ojos y asintio. Luego siguio su camino hacia su habitación evitando pensar en las rebeldes y locas ideas de sus padrino.

Always-Nuevo inició.Where stories live. Discover now