21. Acuerdo

109 11 105
                                    


La posada Qianlan, ubicada al centro de Ciudad Caiyi, hospeda a personas y familias que generalmente llegan de paseo, a conocer la ciudad y sus alrededores. Es la más grande en su tipo, y realmente acogedora si se trata de pasar días de asueto o vacacionales, desde cualquier lugar. También ha servido a quienes van a visitar las montañas o el lago de Ciudad Caiyi, como el principal centro de atracción turística, también si se va a hacer diligencias a la ciudad o visitar Gusu Lan, como ahora Jiang Cheng y Wei Wuxian lo estaban haciendo.

Cada uno de ellos ocupó su propio cuarto, a insistencia de Wei Wuxian, que presentía que los Jades Gemelos de Gusu Lan los alcanzarían en cualquier momento.

Tal predicción fué cumplida, por lo que Lan Xichen, Lan Wangji y Lan Sizhui fueron invitados a una cena especial, para celebrar el triunfo del Primer Jade sobre el Consejo de Ancianos para la permanencia de su hermano y su sobrino dentro de la secta de la nube.

Cómodamente sentado en las piernas de Lan Wangji, con el brazo alrededor de sus hombros, Wei Wuxian brindó con la otra mano, que sostenía su jarra de licor, de la que dió un nuevo trago.

-¡Por el Líder de Secta de Gusu Lan!

En la privacidad de una de las habitaciones rentadas, un orgulloso Jiang Cheng se sintió libre de conducir el rostro de Lan Xichen hacia sí, para besar de nuevo sus labios, quien amorosamente lo tenía sostenido del hombro.

-¡Por el Líder, Zewu Jun!

Ambos Jades respondieron con un pequeño cuenco de té. Por su parte, Lan Sizhui bebió un sorbo de Sonrisa del Emperador en su representación.

- ¡No es justo, Lan Zhan! Estamos brindando por ustedes y sólo se conforman con un té desabrido. - Miró Wei Wuxian a su esposo, quien en silencio volvió a beber de su cuenco.

- Debemos comportarnos, ahora mejor que nunca. - Contestó Lan Wangji, refiriéndose a su estado de sobriedad. - Además, quiero cuidarte.

Sin reparos, Wei Wuxian respondió con un beso profundo a su esposo, haciéndole marear levemente por el ligero aroma a alcohol de su aliento. Lan Wangji sostuvo con fuerza la cintura de Wei Wuxian.

- Tranquilo, Er Gege. Estamos en presencia de la familia. - Intentó calmarlo Wei Wuxian, mientras evitaba que Lan Wangji desatara su cinturón, frente a todos.

- ¡Ni que lo digas! - Intervino Jiang Cheng percatandose de su propio error, al sentir el abrazo más apretado de Lan Xichen, para besarlo del cuello. - ¡Basta Lan Huan! ¡Recuerda que estás en la mira de todos! Además hay un menor frente a nosotros.

Sin soltarse de Lan Wangji, Wei Wuxian volvió contento su vista hacia Lan Sizhui - Me alegra mucho verte libre y recuperado, A-Yuan.

Entre las muestras de afecto a su alrededor, Lan Sizhui intentó disimular su incomodidad. Sonriendo contestó serenamente. - También me alegra mucho que estén aquí. Lamento que Jingyi no lo sepa, estaría muy contento de verte, Maestro Wei.

Bajo un leve efecto del alcohol, Wei Wuxian, fingió sentirse indignado. - A-Yuan, tanto tiempo en Gusu te ha hecho olvidar que puedes llamarme papá. En cuanto a Jingyi, el pobre debe estar esperando a que vuelvas, lo mejor será que ahora regreses con él. - Wei Wuxian colocó un palillo sobre el mohin de sus labios, para concluir de manera mustia. - No creo que a A-Ling le moleste, si ésta noche te vas con Jingyi.

A la mención de su sobrino, Jiang Cheng alzó una ceja, mientras escuchaba decir a Sizhui un "¡por favor, papá!"

Resignado a no poder debatir con su padre en ese estado Lan Sizhui respondió a la indirecta. - ¡Gracias por tu preocupación! Jingyi debe sentirse muy solo, así que iré de inmediato con él. Ya me voy, no se preocupen por mí y pásenla bien.

Sol de JadeWhere stories live. Discover now