Capítulo 7: El destape

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Advertencia:

Este capítulo toca temas vinculados al alcoholismo y una leve mención a ataques de pánico causados por TAS (Trastorno de Ansiedad Social) que puede resultar incómodo y/o delicado para algunas personas.

Cabe recordar que para escribir sobre temas relacionados con adicciones/problemas de cualquier tipo siempre me informo con anterioridad para escribir con la mayor coherencia que sea posible y que la mayoría de las situaciones de este fanfic están basadas en acontecimientos reales, por lo que me aseguro de relatar desde un punto de vista realista.

Y demás está decir que mi intención no es alentar dichas adicciones, sino lo contrario.

Por favor, leer con criterio formado.


Al finalizar su día laboral en City Wok el día viernes, Kenny recibió una llamada a su celular solicitando su servicio de DJ en una fiesta organizada en el asilo de ancianos de South Park.
No era su ambiente, pero por la cantidad ofrecida no podía negarse. Llegó a su casa, se bañó rápido, le dejó comida para calentar junto con una nota explicando su ausencia a su hermana y partió al asilo con su computadora y la mezcladora de sonido.
La fiesta estuvo entretenida para tratarse de ancianos, bailaron canciones viejas, se sumaron a las actividades planeadas por los cuidadores del asilo, jugaron al Bingo (y en esta ocasión, Kenny fue quien cantó los números que salían en la bolsita) y hasta bailó con algunas ancianitas. Se caía del sueño en la computadora, pero no podía decir que fue una mala noche, se sintió bastante cómodo y dentro de todo le trataron bien.

Llegó a su casa alrededor de las dos de la mañana y con las pocas fuerzas que le quedaban, dejó las cosas que llevó en la mesa y se desplomó en el sillón sin cenar (no es como si hubiera algo para cenar de todos modos). Aunque gracias a esa fiesta, ahora tenía algo de dinero para comprar comida suficiente para algunas semanas y con algo de esfuerzo (o suerte) tal vez le alcance para pagar la renta y algunos servicios.

La alarma de su celular sonó cinco veces, pero no la oyó, lo cual era de lo más esperable, había estado despierto desde las siete de la mañana hasta las dos de la madrugada sin una siesta de por medio.

Karen se acercó a Kenny con una bandeja en mano: dos tostadas peladas y un vaso de leche, el último hasta que Kenny o ella pasen por el supermercado.

Se detuvo a mirarlo antes de despertarlo, no quería arruinar esa imagen, la imagen de Kenny tranquilo, descansando, sereno, sin preocupaciones ya que no parecía estar teniendo pesadillas.
El sillón no era cómodo para dormir, los almohadones estaban gastados y hundidos, por lo que imaginaba el cómo le dolerían las costillas después de dormir toda la noche contra la madera que se sentía por debajo.

Pero ahí estaba: relajado, dándose el descanso que merecía.

Ojalá verlo siempre así.

-Kenny...- Lo llamó con dulzura, aún contra su voluntad.-Kenny, ya son las ocho, levántate.- Sin respuestas.-Te hice el desayuno.

Kenny se movió sobre el sillón hasta que su cara quedó al descubierto. Abrió los ojos con pesadez, los refregó con sus manos y miró a su hermana con la bandeja.

-Ay... Gracias princesa.- Le dijo entre bostezos.-No tenías qué...

-Sí, sí tenía.- Objetó. Volvió a poner una sonrisa mientras acercaba más la bandeja.-Siéntate.

Kenny obedeció a su hermana y se sentó en el sillón, tratando de disimular una mueca de dolor. Si sus costillas pudieran hablar...

Ella acomodó la bandeja en sus piernas y se sentó a su lado. Kenny levantó el brazo para que su hermana se acercara. Karen apoyó la mejilla en su hombro y dejó que la abrazara.

Good Boys with Bad Habits║ «South Park»║ EN HIATUSWhere stories live. Discover now