𝑀𝑎𝑠𝑞𝑢𝑒𝑟𝑎𝑑𝑒 ~𝐿𝑒𝑣𝑖𝐻𝑎𝑛~

𝑉𝐼𝐼 𝑅𝑒𝑔𝑟𝑒𝑠𝑖𝑣𝑜

Tenía un lapso para vivir este momento utópico, 27 días era lo que me restaba para que el año final en Sina me encerrara hipotéticamente en aquellos muros de oro, lo odiaba por supuesto pero estábamos cada vez más cerca de obtener nuestro propósito con Erwin, sabría al fin lo que Andrew tanto ocultaba y si bien Ilse ha sido de mucha ayuda estos años había información incompleta o incluso nula sobre mi padre y sus estudios a profundidad, no creo que en la herencia esté con claridad la respuesta pero sí una pista así que esta recta final debo hacerla perfecta y resaltar mucho más en Sina como esa absurda Diosa dorada.

Sin embargo quería compensar mi enamoramiento con Levi encaminando estos 27 días, si bien es cierto que estos momentos pueden ser cruciales para resquebrajar mi máscara o máscaras también era cierto que mi corazón humano latía en la necesidad de dejarse llevar por aquel nuevo sentimiento que estaba experimentando con mayor complacencia a medida que veía esos ojos azules con gris en una mezcla de cuidadosa armonía, es que Levi tenía algo que podía intuir pero no terminaba de comprender, él conocía mi verdadera yo y a la vez no tenía una mínima idea de las máscaras que cargaba, de mis sombras así como mis cambios repentinos de personaje, yo era como un títere de alguna obra de teatro que rotaba, era una actriz que modificaba sus atuendos, su personalidad, su mirada, sus gestos, todo en mí era falso y el único que conocía a la verdadera mujer debajo de esa línea de personajes bien trabajados por años era él, por eso sentía una emoción fuerte sumándole el hecho de que mi cuerpo se apegaba por inercia al suyo y como ya había dicho... no tenía un mínimo de idea de cuán adictivo puede resultar un instinto primitivo.

Tras la partida de Erwin ese beso endulzado ácidamente con las palabras de Levi hicieron que mi mundo trastocase en un giro de 180° después de todo él también era una tentación en mi cuerpo, un caos en mi corazón, un intruso en Mascarade, un deseo profundo así como el sentimiento más infantil e inocente que he podido tener, no concebía más opción que empezar a dejarme llevar por mis sentimientos porque... no habría arrepentimientos.

Terminamos el desayuno entre bobadas con una repercusión en miradas, luego él se levantó tomando la vajilla vacía y sucia para dirigirla al lavaplatos, mientras empezaba el proceso de jabonar y remojar luego habló sin siquiera mirarme con un tono fijo pero suave.

~Oi acaso ¿No vas a cambiarte de ropa?.

~¿Eh?...

~Tú querías salir ¿No es así?.

~Entonces deberías bañarte igual.

~Ve tú.

Si no tenía más opción me inmuté a escucharlo retirándome en dirección a mi habitación, ver todo en orden me hacía pensar en cómo ambos tenemos dos facetas mutuas "espero" de convivencia, no me había dado cuenta hasta este instante que Levi había entrado anoche en mi departamento y solo se acurrucó conmigo, sin toqueteos, sin interacción sexual, solo dormir, solo coincidir corporalmente pero conectar en nuestras almas, sí yo sé que suena cursi y jodidamente ridículo pero así se sentía, nuestro pacto si bien generaba convivencia en el plano sexual por esta noche había sido sepultado en algo más dulce y ¿romántico? Ojalá fuese así, que el universo me escuche, ojalá dé oportunidades a las personas falsas como yo.

Pero el objetivo claramente no era mortificarme así que arreglé rápidamente la cama para luego sacar del clóset un pantalón de mezclilla con un buso grande color morado de cierre, debajo usaría un bralette blanco y a juzgar por el clima que aún estaba ligeramente nublado sería mejor colocarme una blusa de manga larga de color crema, con el outfit seleccionado ya sobre la cama entré a mi baño para abrir la ducha, tras dejar las toallas a la mano entré apacible bajo el agua de quizá unos 38° C y me dejé llevar por la sensación, varios minutos después sentí como la puerta del baño se abría, mi cristal de la ducha era transparente pero con el vapor se empañaba en totalidad, no sabía que sucedía así que quise preguntar pero antes de emitir mis pensamientos la puerta de cristal se abrió a lo que con sorpresa regresé mi mirada y allí estaba él totalmente desnudo, por primera vez me sentí muy expuesta ganándome el sonrojo y lo primero que hice fue darle la espalda.