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No es que Hoseok pueda nombrar amigo a Jungkook aún, pero en un lugar en donde están los dos solos todo el tiempo, el pelinegro seguro que se ha convertido en alguien cercano, en una persona que es mucho más amistosa hacia él. Hoseok todavía sigue sintiendo una burbuja de incertidumbre e incomodidad cuando el pelinegro comienza una conversación o le habla sobre algo que Jimin u Yoongi hicieron en el pasado, porque es extraño que Jungkook actúe así de amable hacia él, sin embargo, está bien porque la actitud nueva del leopardo le agrada mucho más que la anterior, así que en algún momento tendrá que acostumbrarse.

Jungkook desliza los pantalones por sus piernas, dejándolos en el borde del río y arrojándose al agua, salpicando la prenda por igual. Hoseok no cree que algún día sea capaz de mostrar su cuerpo de la forma en que el leopardo lo hace.

Los dos se han visto obligados a bañarse en el río, el montículo de agua que conforme se aproximan más al este y se alejan del sur, se ha apaciguado, las corrientes son mucho más suaves, ya no son intensas y peligrosas como en las que se zambulleron para escapar aquel día.

Hoseok ingresa un pie y luego el otro, apenas en la orilla, el agua se remueve bajo su peso. Toma el borde de su camisa ancha y conforme el agua cubre sus caderas y oculta su desnudo cuerpo, desliza la prenda hacia arriba hasta que está totalmente oculto bajo el agua fría.

Él se asegura de dejar la camisa afuera antes de sumergirse por completo.

"¿Por qué ocultas tanto tu cuerpo?" Jungkook le pregunta tan rápido como Hoseok regresa a la superficie con gotas dulces descendiendo por su cabello, el pelaje de sus orejas pesado por el agua "¿No te gusta?" El leopardo agrega rápidamente, acercándose a la orilla en donde yace él.

Hoseok resopla pasando una mano por su cabello, alejando los mechones mojados de su frente "No es eso, simplemente en mi sociedad no es normal andar por allí desnudo, así que no estoy acostumbrado a hacerlo" Jungkook sonríe, una mueca que es demasiado burlona y tiene a Hoseok alzando una ceja hacia él.

"¿Es por eso que te sonrojas cuando ves un poco de polla?" Y ni siquiera es gracioso que su cuerpo lo traicione, con su torso, y rostro tornándose de rosa por la mención de ello, pero lo hace y el hecho tiene al leopardo sonriendo con aires de suficiencia, golpeando el interior de su mejilla con su lengua mientras gotas de agua caen de sus orejas.

Tan engreído.

Hoseok está a punto de decir algo sarcástico, tan ingenioso como es haría que el leopardo también se sonrojara para conservar algo de su dignidad, pero él se detiene abruptamente, reteniendo las palabras en su boca al observar la forma en que la sonrisa de Jungkook se transforma en una mueca, y como si fuera posible, puede jurar que el aura de burla alrededor del pelinegro se ha extinguido hasta que todo lo que su cuerpo transmite es seriedad.

Jungkook se inclina, con su expresión llena de firmeza y sin risa en su tono, al decirle "Los tuyos son demasiado rectos, con una y mil reglas, no me refiero a las normas que han sido creadas para mantener el orden en el mundo, esas son necesarias, pero están todas esas otras estúpidas reglas. Las veces que he ido a visitar a mis amigos en los otros reinos o cuando simplemente he estado fuera de mis tierras, es un poco horripilante tener que actuar como los demás, tengo que usar un hanbok y comportarme de una forma muy específica porque de lo contrario me señalarían o juzgarían, incluso se burlarían de mí, lo que no me importa, pero es desagradable ¿Sabes? No poder ser yo mismo allá afuera" Jungkook se detuvo, mirándole en silencio, a la distancia se agitaban las ramas de los árboles contra el viento, los pájaros cantaban en el horizonte y el río goteaba hacia lugares lejanos. Por lo que se siente como primera vez Hoseok está de acuerdo con Jungkook en algo.

En su sociedad las apariencias lo son todo, él mismo lo ha sentido, al ser un rostro público y de la realeza, seguido por miles de ojos que le exigen ser perfecto, cualquier acción que él llevará a cabo debía ser impecable, siempre respetuoso, siempre sonriente ¿Pero y todas las otras emociones, qué? ¿Acaso no son válidas? Reír, llorar o enfurecerse frente a alguien, él creció en un entorno en el que tenía estrictamente prohibido demostrar cada una de esas emociones, pero eso no fue lo único que se le restringió porque incluso las cosas que le apasionaban no eran percibidas correctas para un príncipe.

IN THE WAR [JUNGHOPE] Where stories live. Discover now