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Capitulo 27:

Hacía seis meses habían comenzado la universidad, y hacía un mes Jake sentía como él y SungHoon se alejaban cada vez más. Eso no le gustaba al mayor, eso le dolía demaciado. De estar  todos los días hablando, riendo, saliendo de paseo, ahora solo se veían a la noche, cuando ambos estaban en aquel departamento que compartían.

—Hoonie, mañana...—comenzó a decir el mayor mientras observaba a su novio, quién estaba con sus apuntes estudiando—mañana...

—¿Podemos hablar en otro momento? Mañana tengo un examen y debo estudiar.

La voz del menor salió seca y sin una pizca de ese tono amable y dulce con el que solía hablarle.

Jake asintió levemente y se reincorporo del sofá, tomo su taza con té y se dispuso a dirigirse a su recamara.

—Me iré a dormir ya. Hay comida en la nevera.

—Que duermas bien, hyung—dijo sin siquiera mirarle.

—Lo... Lo mismo para ti, Hoon.

Si bien las palabras del mayor salieron en un tartamudeo y con la voz completamente rota, el pelínegro siguió leyendo sus apuntes. SungHoon en ningún momento volteó a verle.

Jake paso la noche dando vueltas en su cama, pensando en que le había hecho al menor para que lo tratara de esa forma tan distante. Él no recordaba tener alguna discusión, tampoco algo que trajera uno de los episodios de SungHoon. No era un episodio. Jake sabía reconocer cuando su novio tenía un episodio.

A la mañana siguiente cuando SungHoon despertó, Jake ya no estaba en casa, en su lugar había una nota en la nevera.

"Tuve que salir temprano a clases. Recuerda comer bien, ¿si?
Suerte en tu exámen, aunque seguro no la necesitas"
Te quiero.♡"

El pelínegro tomo las llaves y su mochila, luego salió de casa dejando en la mesa desayuno que el mayor había preparado para él.

[...]

—¿Por qué esa cara, Jakey?

El menor levantó la mirada manteniendo su puchero, dejando a Jay algo confuso al ver por las lágrimas que tenía su cuñado resbalando por las mejillas.

—Pero, ¿por qué lloras?—el azabache se apresuró a acercarse al castaño y ofrecerle una servilleta de las que estaban en medio de la mesa de ese cafe—Jake...

—Su-SungHoon... Hace un mes... un mes...—sus palabras salían entrecortadas por culpa del llanto—hace un mes lleva ignorandome y... Me lastima mucho, hyung.

Jay observó con pena a su amigo, quién volvió a bajar la mirada. Sin dudarlo, lo envolvió entre sus brazos, buscando de alguna forma consolar a JaeYoon.

No le gustaba ver a sus amigos mal, mucho menos a Jake, quién ya era parte de la familia.

—Él... Él ya no me quiere

—No digas algo así, Jake.

—Pero, ¿y si es así?

"Y si es así, SungHoon es un idiota" peso Jay.

—Yo... yo debo llevarle el almuerzo a Hoon.

—¿Se lo llevarás a pesar de que está siendo un idiota?—Jake se reincorporo del pequeño sofá de aquella cafetería y asintió—como quieras. Si yo fuera tú, lo mandaría al diablo.

BonhomieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora