𝐀𝐝𝐯𝐞𝐫𝐭𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚: No pondré porque sino quita la escencia pero solo dire que hay Smut. Ya sabes si no te gusta NO LO LEAS.
𝐀𝐮𝐭𝐨𝐫: Yop
Espero y sea de tu agrado. Pedido: Anónimo.
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ー Es una maldita perra ー dijo aquella chica en manera de burla y odió.
ー Solo ignorala ー su amiga le dijo intentando distraerla pero le fue imposible.
ーNo, no lo haré. ¿Has visto como la mira? ー molesta vió disimuladamente a la chica de la que hablaba.
En el club nocturno resonaba la voz del chico que tanto deseaba, Eddie Munson. Ese chico si que tenía mujeres deseando por él, y quien no, era demasiado atractivo como para pasar desapercibido, pero a pesar de tantas mujeres el sólo tenía su atención en ella, esa chica de piel morena y esa mirada de misterio que lo hacía volver loco.
Aún recuerda la primera vez que la vió, fue como si viera a un ángel muy pero muy sexy y desde ese día no podía quitarle los ojos de encima. Cada canción que tocaba era para ella, cada sentimiento que describían sus canciones era por ella, solo para ella y por ella; y eso era algo que las chicas del lugar detestaban.
Su pequeño concierto termino y esto era señal de una sola cosa, era el momento de que T/N saliera a dar su show y Eddie no podía esperar más a ver como bailaba.
ー Señoras y señores, démosle la bienvenida a nuestra nueva integrante y favorita T/N T/A ー las personas que estaban en el lugar gritaron esperando a que saliera a escena, era la chica mas popular y todos esperaban verle.
Las luces se apagaron y la musica sonó a todo volumen, Eddie intento mantener su atención en su banda o fingir que limpiaba su guitarra pero le era imposible apartar sus ojos de ella. T/N salía caminando lentamente con su típica mirada seductora y misteriosa que tanto lo derretía, ella paso a primer plano y dejo lo que estaba haciendo para verla solo a ella, lo tenía totalmente ebrio.
Quito la prenda que cubría su cuerpo dejando a la vista sus largas piernas, ese trasero que tanto amaba Eddie y sus suaves senos. El conjunto rojo pasión que adornaba su cuerpo junto a la transparencia que este presentaba fue la gota que derramo el vaso haciendo que Eddie babeara más de lo que normalmente hacía. El arnes que adornaba sus piernas, su cadera hasta sus senos y el tatuaje que tenía entre sus senos hasta su ombligo lo termino de matar.
Su cuerpo se movía al ritmo de la música, la manera tan fácil en la que se deslizaba en aquel frío metal, las vueltas y como sus piernas eran el centro de atención. Estaba tan concentrado en su trasero que no noto cuando en todo su baile ella lo estaba viendo, hasta que uno de sus amigos le dió un codazo para hacerlo conciente de lo que estaba pasando y ahí fue cuando lo noto, ella le estaba dedicando ese baile.
