Harry Potter y la Congregación de los Áspides

Capítulo 11

Toledo – 20 de agosto

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La mayoría de los invitados habían vuelto a abandonar la finca, algunos en plena noche, el resto esa misma mañana. Poppy, la única entre los maestros que sabía un poco sobre la Congregación, les deseó lo mejor e incluso abrazó a Daphne.

Los Granger se habían quedado, también Augusta Longbottom y, naturalmente, el espiritista Nowles. Hermione estaba un poco descontenta de que a sus padres no se les permitiera ver la unión. Especialmente a su madre, quien en su opinión tenía un papel importante en que Hermione estuviera aquí, en este punto de su desarrollo, le hubiera encantado acompañarla. Hermione entendió que era demasiado peligroso permitirlo. La identidad de los miembros superiores de la Congregación era demasiado importante para ser conocida por alguien que no podía ocultarla. No había manera de enseñarle Oclumancia a su madre, ya que requería un núcleo mágico para empoderarlo.

Hermione suspiró. Después de que Harry detectó el estado Squib de su tía y su prima, ella esperaba que fuera similar con sus padres. Sin embargo, ni Emma ni Dan Granger eran Squib. Una sonrisa de corta duración apareció en su rostro. A pesar de algunos rumores en Hogwarts, rumores difundidos por sangre pura que no estaban dispuestos a creer que una sangre sucia pudiera ser una bruja tan poderosa, ella no fue ni adoptada ni cambiante ni el resultado de una donación de semen. Simplemente era la hija de Emma y Dan Granger, dos muggles, y le gustaba así.

A veces temía perderse en este nuevo mundo, abandonar a su familia mientras aprendía sus costumbres en la sociedad mágica. Sin embargo, Augusta había calmado sus preocupaciones: "No es unilateral, querida. Estás en camino al mundo de la magia y Neville está aprendiendo a vivir en el mundo de los muggles. Juntos están en camino hacia un futuro". donde los muggles y los magos pueden vivir juntos, esa es mi esperanza: si alguien como Neville, un mago de una antigua familia de sangre pura, y tú, nacido en una familia que no podría ser más muggle, pueden arreglárselas el uno al otro, entonces el resto de nosotros algún día seguiremos tus pasos".

"¿Estás listo?" Roxana le preguntó. Hermione asintió, forzó una sonrisa y siguió a la madrina de Harry.

Era el momento de la Unión.

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Después de un viaje en automóvil de casi una hora, más para permitirles a los adolescentes un poco de tiempo para recuperar sus sentidos que por necesidad, se acercaron al lugar de la ceremonia. Era una Capilla muy antigua perteneciente a un Pazo igualmente antiguo, con aspecto de haber presenciado la desaparición de los últimos moriscos de España hace 500 años. La Capilla no era muy grande y estaba construida con un material simple pero resistente, de un tipo de granito que Hermione habría esperado ver en Grecia pero no aquí. Varios otros autos también estaban aquí y notó algunas caras conocidas entre los guardias. Ninguno de ellos estaría en la Capilla, se dio cuenta Hermione, pero era bueno saber que Carmen y sus amigos estarían cerca.

Roxanne condujo a los cuatro adolescentes al edificio contiguo donde había vivido antes el sacerdote local. Hermione se sintió aliviada de que Roxanne estuviera allí para los preparativos. Adoraba a Agatha y respetaba profundamente a Ana por su dedicación y conocimiento, pero Roxanne había asumido un papel similar al de una tía o más como el de una hermana mayor: Hermione no solo confiaba en ella sino que realmente la apreciaba, un sentimiento que sabía que los demás también compartían.

"Tendremos algunos invitados", explicó Roxanne mientras los adolescentes se cambiaban de ropa. Hicieron esto en la misma habitación, en parte para prepararlos para el ritual. En unos minutos tendrían que soportar las miradas de decenas de observadores. Si no podían mostrar un poco de piel entre sus amigos, no les iría bien más tarde. Hermione vio que Harry miró varias veces en dirección a Daphne y se sonrojó cuando notó que Neville hacía lo mismo con ella. Saber que Neville pensaba que ella era atractiva de alguna manera calmó sus nervios. Sólo sus ojos serían importantes más tarde.