Ahora soy Juli@ |Finalizado|

Extra especial: La vida de los mellizos

[Siendo posicionado en los últimos dos años como una empresa emergente y exitosa. El empresario y fundador de esta empresa, Julio Ruiz, nos brindó una entrevista en exclusiva el último viernes, junto a su esposo. Quien también es su mano derecha y el co-CEO de la «Empresa de consultoría financiera J & H asociados»...]

Después de tanto esfuerzo, algunos tropiezos y su esperado éxito, Julio logró cumplir su sueño de tener su propia empresa exitosa luego de trece años de arduo trabajo, ya que no solo se enfocó en ser empresario, también el de ser un buen padre para sus hijos. Por lo que Hernán nunca lo dejó apoyar en su sueño todo ese tiempo.

Viendo emocionadas la televisión de uno de los restaurantes en donde almorzaban, dos jóvenes estudiantes discutían entre sí sobre la belleza de aquellas personas famosas.

—Es un hombre guapo, no me importa la edad. Tiene un aire elegante y suave a la vez. Yo sí sería su amante.

—¡Estás loca!, es por lo menos dos décadas mayor que tú. Y está casado con un hombre. –Le replicó su amiga.

—También su esposo es muy guapo, y no parece ser de este país, por lo menos me quiero casar con uno de los hijos.

—No hables tonterías, ni siquiera los conoces. Pero, sí están guapos... Además también mostraron a sus hijos, ya eran algo conocidos por las competiciones nacionales de karate, pero ahora son mayores de edad, es imposible no notarlos.

—¿Por qué todos en esa familia son tan guapos? Es difícil de elegir –mencionó suspirando con ensueño.

—Por favor, pisa tierra...

—De hecho, ¿no es algo curioso que ambos hijos se parezcan a cada uno de sus padres? ¿Acaso no fueron adoptados? Es una locura lo parecidos que son, parecen ser mellizos.

—Dicen que la mayor es la hija biológica de uno de ellos y que el hijo menor fue adoptado.

—A mi me parece que cada uno tuvo a su hijo y se juntaron. Bueno, eso que importa, siguen siendo guapos y adinerados.

—Ni cómo detenerte cuando te ilusionas...

En otro lugar muy alejado de ese, habían dos personas que simplemente no aceptaban el ver el triunfo de una persona, que alguna vez despreciaron en el pasado.

—Esto es un jodido mal chiste, si hubiera sabido que se iba a convertir en un hombre tan rico, nunca me hubiera opuesto a su matrimonio con mi hija Carla –mencionó con enojo la exsuegra de Julio. —Maldición, encima esa hija malagradecida huyó de su matrimonio, ¡cómo se atreve a dejarnos y nunca comunicarnos con nosotros hasta ahora!

—Ya cálmate mamá, ¿acaso no has oído? Él se terminó casando con un hombre, que también es muy adinerado. Tal vez, algún día iba a dejar a mi hermana por sus preferencias.

—¡Eso qué importa! Esa hija tonta iba a tener mucho dinero, nosotros hubiéramos sido ricos si se casaban con bienes compartidos. Pero se fue dejándonos en ridículo.

—Supéralo mamá, eso sucedió hace como diecinueve años, no estás en edad de pensar cosas del pasado, ya no tienes cuarentena y cinco años.

—¡Encima me dices vieja!

—Ay por favor mamá... Dame un día de respiro.

Sintiendo la conmoción de las personas, aquellas personas famosas que salían en televisión y de las cuales eran habladas en todas partes del país. Estaban ahora en la calle en medio de una salida familiar. Pero debido a solo querían pasar un tiempo tranquilo, todos vestían ropas casuales, con unos gorros puestos en su cabeza. Siendo Julio el que estaba al medio de ellos, siendo evidente quién era la cabeza de aquella familia, aunque era el más bajo de los tres. Ya que ambos hijos, habían crecido tan enormes como su padre Hernán. Haciéndoles sombra suficiente para él, en ese día caluroso.