-T2-Capítulo 35 Reuniones forzadas y un rehén

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🍁Capítulo 35 «Reuniones forzadas y un rehén»

Una idea lógica, es siempre tomar las situaciones incómodas y críticas con calma y pensar en las posibles soluciones. Pero eso no pasó por su mente en Julia en ese momento. De hecho ninguna idea fue buena, por lo que lo único que expresó en ese momento fue una advertencia.

—Sal.

Luego de un incómodo silencio, lo que escucharon sólo fue la palanca del retrete ser bajada.

Levantando su pierna derecha y recordando sus días de Karateca, abrió a la fuerza la puerta de una sola patada.

—¡Te dije que salgas!

Viendo aquello Hernán pensó curioso. «Después de todo cuando está llena de adrenalina si puede ser peligrosa.»

La mano de Julia tembló al señalarlo, luego de haber visto el rostro del personaje indeseado. Reconociendo su suerte, no era de extrañar que quien estaba ahí era su cuñado recién casado.

—Hola.–André alzó su brazo sentado sobre el retrete, con el pantalón bien puesto, para su suerte.

—Hola.–Imitó Hernán

—¡No le sigas la corriente!

André trató de hablar.

—Cuñado...
...
...
¿Cuñado? Ni siquiera sé que decir ahora.

—Sólo una pregunta ¿Escuchaste todo?

—¿De que eres una mujer vestida de hombre? Siendo hombre, Hernán, eso si es raro y gracioso.

Hernán sólo asintió.

Julia sabía que está vez era su culpa por no darse cuenta de su entorno y la medida de sus palabras y Hernán no ayudó mucho, pero fue suficiente la humillación hecha de quien quería su respeto, la viera de ese modo.

—Lo siento Meri, perderás a tu novio tan pronto.–Giró a su derecha.—Hernán ayúdame.

—¿Por qué? Suficiente con ser testigo de una futura escena nada agradable.

André dio un brinco hacia Julia.

—¡Espera cuñado o cuñada! Oh lo que sea, ¡somos personas civilizadas! Eso suena como el preludio para un asesinato.

Julia suspiró con pesadez.

—Entonces. Conversemos.

—¡Eso! ¡Esa es la solución más civilizada!

La sonrisa de su cuñado fue borrado luego de que unos minutos después, André terminara encerrado en un almacén, junto a Julia y Hernán.

—¿Están seguros que no me están secuestrando?–André pasó saliva nervioso.

—Uno. Escúchame.
Dos, dirígete a mi como Julio.
Tres, has la promesa por tu vida que nunca le dirás nada a nadie lo que viste hoy. Cuñadito.

—Bien, si pones mi vida de esa manera, no hay forma que no acepte. Entonces...¿me podrías aclarar porqué estás así? Ni siquiera pareciera estar hablando con Julio...

—¡Tú!–Julia tomó un gran bocado de aire.—Sé que no eres nada tonto al darte cuenta que...Ya sabes.

—No sé.

—Que...soy una mujer ahora.

—Ah...sí de hecho. Para serte sincero estoy tratando procesar ese detalle. Muy importante por cierto ¿Hernán tú sabías eso?

—Desde el principio. De hecho fue la primera razón de nuestra cercanía.

—Ah...

—André, estás realmente calmado, tanto que es difícil creerlo.–Julia lo miró fijamente.

Ahora soy Juli@  |Finalizado|Where stories live. Discover now