CAPÍTULOS DEL 141 AL 148

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CAPÍTULO 141. NIETO MAYOR IMPERIAL QIN YUNLIE (1)
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Después de tener ese tipo de sueño, incluso si fue Shen Liang quien renació, se quedó atrapado en su sueño durante mucho tiempo. No sabía si era el seguimiento de su vida anterior o por qué soñaba con esas cosas, pero al menos quería creer que lo que pasaba en ese sueño era cierto. Al menos, su tío y sus primos seguían vivos, al igual que Pei Yuanlie, y habían derrocado al Gran Qin. Incluso vio a Shen You, que tenía unos diez años, un joven muy guapo y encantador. Y Qin Yunshen, la familia Shen y la familia Liu habían pagado el precio que se merecían.

"¿Has visto suficiente?"

Nadie sabía cuánto tiempo había estado sentado allí con cara larga, Shen Liang finalmente volvió en sí y lo miró sin palabras. Le cogió la mano para comprobar su estado, y la sonrisa en los labios de Pei Yuanlie, que estaba apoyado en la cabecera de la cama, se ensanchó. "No, nunca es suficiente. Si es posible, quiero mirarte así para siempre. Eres tan hermoso que nunca vería suficiente."

Cuando se despertó antes, le vio durmiendo a su lado. Incluso él se sobresaltó durante un rato. Pero al ver sus lágrimas rodando desde su sueño, sintió mucha pena por él. Sabía que tal vez no lloraba mientras dormía porque estaba preocupado por él, pero estaba seguro de que él debía ser parte de la razón.

"Pensé que su alteza no quiere volver a verme. No, para ser exactos, no quiere ver el paisaje de ayer."

Después de confirmar que su estado se había estabilizado, Shen Liang se sacudió la mano, se alisó el pelo y se lo ató con un pañuelo negro.

"¿Adónde vas? Quédate conmigo."

Agarrando al que estaba a punto de trepar sobre él, Pei Yuanlie ejerció un poco más de fuerza, y el cuerpo de Shen Liang cayó hacia él. Y su gran mano le sujetó directamente y le hizo apoyarse contra su pecho. "¿Estás loco? No era mi intención. La medicina que me dio mi shifu cuando me hirieron la última vez aún podía usarse. Pensé que no habría problema mientras la herida no fuera muy profunda. No esperaba que no funcionara."

Para ser honesto, todavía tenía un miedo persistente ahora. Afortunadamente, su Liangliang fue lo suficientemente capaz como para detener su hemorragia y le hizo recuperarse rápidamente con el método de transfusión de sangre que había desaparecido durante cientos de años. Ahora su sangre también circulaba por su cuerpo. Habían estado juntos de alguna otra manera.

"¿Qué te parece?"

Deshaciéndose de su agarre, Shen Liang levantó las cejas y se sentó con las piernas cruzadas. "No intentes utilizar semejante truco conmigo. Llevas envenenado más de diez años, y es imposible que no sepas que el efecto de esa medicina es cada vez peor. Puede que la última vez ya no fuera del todo útil, pero aun así elegiste buscar la muerte de esta manera. Pei Yuanlie, ¿crees que eres un gato que tiene nueve vidas?"

Debido al sueño, Shen Liang no estaba tan enfadado ahora, pero cuando escuchó su explicación, no pudo evitar arder de ira de nuevo. No se creía que realmente no conociera su propia condición física.

"No digas eso. Lo calculé mal."

Pei Yuanlie mordió la bala y dijo con impotencia. Parecía que a veces no era bueno que su princesa heredera supiera de medicina. Era difícil engañarle en momentos como ahora.

"Vale, lo tomaré como que lo has calculado mal. Hablemos de otra cosa."

Respirando hondo, Shen Liang levantó la cabeza y le miró a los ojos. "Has estado buscando el manual de medicina y veneno todos estos años. Puedo dejarlo pasar ya que antes no lo sabías. La última vez, sabías que el manual lo tenía yo. ¿Por qué no me dijiste que estabas envenenado? No inventes razones para engañarme. ¿No confías en ti mismo o no confías en mí?"

LA LEYENDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora