Mi mejor error (sillie)

capitulo 16

Pov millie:

Habían pasado ya 6 semanas desde que fuimos a casa de noah, el hace poco les dijo a sus padres que era gay, a lo que ellos no se sorprendieron, pues lo sospechaban hace ya bastante tiempo, bien se notaba que noah era gay.
En otras noticias, hoy le quitan el yeso de la mano a sadie, estuvimos muy ansiosas todo el día, hasta que el momento de ir a la clínica llegó.

Pov sadie:

Me encontraba en el auto, millie y yo nos dirigíamos a la clínica, pues hoy me quitaban el yeso de la mano, estaba demasiado nerviosa, no sé porqué, pero supongo que era la emoción, millie al notar que estaba tan nerviosa me habló.

-sadie.-dijo la castaña, sacandome de mis pensamientos, viéndome de reojo pues ella estaba manejando, así que no podía verme muy bien o chocariamos.

-mm?.- dije respondiendole a millie.

-que ocurre?-preguntó millie un tanto ¿preocupada? Creo.

-oh, nada, estoy algo nerviosa mills no te preocupes.- dije tocando la pierna de millie con mi mano izquierda, solo acariciándola, no era nada raro, me gustaba hacer eso para que se sintiera tranquila.

-está bien sads, yo también estoy algo nerviosa, más bien ansiosa, quiero abrazarte sin tener miedo de lastimar tu mano o algo así.-dijo mi novia concentrada en el camino, su mirada ahora se notaba más tranquila.

-no será porque quieres mis dedos dentro de ti?- pregunté, sacándole un leve sonrojo a millie y ella solo puso el ceño fruncido ante mi pregunta, me gustaba ponerla nerviosa, también estaba muy ansiosa por esta noche, digo 2 meses sin hacer... bueno ya saben, aunque claro que aveces teníamos esa cosa con nuestras lenguas, pero no daré detalles.

-sadie! Hablaremos de eso después, dios eres una hormonal.-dijo millie más roja que un tomate, casi del color de mi pelo, debido a mi pregunta.
Llegamos a la clínica y me atendieron bastante rápido, el doctor me dijo que entrara y me sentara en una tipo camilla que estaba ahí mismo, sabía que no iba a doler, pero la mente es poderosa, y mis nervios estaban a tope.

-hola sadie, está nerviosa?.-preguntó el doctor.

-algo.-dije, aunque no era "algo" era bastante, sabía que esa mierda no me iba a hacer nada, pero aún así me sentía muy ansiosa, sobre todo por saber si mi mano estaría bien para esa misma noche.

-tranquila señorita sink, esta sierra no está echa para cortar piel humana, es prácticamente imposible, aunque si le voy a pedir que no se mueva para poder realizar bien esto.-dijo el doctor tratando de calmar mis nervios, que al parecer eran muy notables, voltee a ver a millie, ella también me vio y me dio una sonrisa, levantándo su pulgar arriba, sacándome una sonrisa a mi también, haciéndome sentir más segura.

-bien.-dije lista para que el doctor me quitara el yeso de la mano, al escucharme el doctor, sacó la pequeña sierra listo para cortar el yeso, antes de proseguir me miro, como comprobando que ya estuviera lista, yo solo asentí con la cabeza y el doctor prendió la cosa esa, empezó a cortar el yeso, no quería ver, me daba bastante ¿miedo? Podría decirse, cuando sentí que terminó voltee a ver mi mano, bien, ahí estaba, aunque tenía algunas marcas del yeso, no importaba, me sentía feliz, voltee a ver a millie, quien al parecer estaba feliz también, lo que más me ponía feliz en ese momento, eran las imágenes obscenas que pasaban por mi mente, planeando esta noche.

-bien, ya está, dolió?.-preguntó el doctor, sacándome lastimosamente de mis pensamientos pecadores.

-no, nada.-respondí felizmente, el doctor nos sonrió a mi y a millie.

-bien, es todo entonces, pueden pasar a recepción a pagar.-dijo el doctor, claro, ahora tocaba pagar, nos dirigimos a la recepción, donde se encontraba un chico un poco mayor que nosotros, era alto, como de 1.70, y delgado, cabello negro y un poco largo, con un pantalón de mezclilla y una playera blanca con una cadena, a decir verdad, no era muy guapo, bueno, para mi gusto no, me dieron ganas de ir al baño, lo bueno es que no quedaba muy lejos de recepción.