Reencarne como un león negro libro 3.

Capitulo 30: El enfrentamiento contra gula comienza.

Punto de vista de Atlas.

Las criaturas enloquecidas atacaban el pueblo de forma repentina y el mensaje había hecho que mi estado de alerta se disparase de inmediato.

Atlas: Caleb toma a Dasha y resguardense lo mejor que puedan-dije mirando seriamente al chico el cual contrario a lo que me esperaba su expresión habia tomado un tono sombrío.

Caleb: no es necesario ella sabe cuidarse por su cuenta-dijo desenvainando sus cuchillos-y no tienes que preocuparte por mi-miro arriba como algunas águilas se lanzaban en nuestra contra.

Atlas: entonces no mueras-dijo sacando del inventario mi hacha y equipando mi armadura salvaje-creo que hoy habra aguila frita y cobayas de acompañamiento con algunas guarniciones de pitones carmesi-dije al balancear mi hacha.

En la academia.
Punto de vista normal.

Chispa: por alguna razón siento escalofríos-dijo haciéndose bolita.

Al hacer esto Melinda simplemente acaricio la cabeza del mismo al no comprender el motivo del comportamiento de su familiar.

Volviendo con el protagonista.
Punto de vista de Atlas.

Atlas: vamos ¿eso es todo lo que tienes?-pregunte luego de usar mi hacha para partir por la mitad a varias pitones seguido de dar un fuerte puñetazo en un cobaya que se había lanzado en contra de mi.

Caleb: ¡¡ no presumas demasiado gato sobrecrecido !!-dijo moviéndose a gran velocidad cortando pitones hasta un águila se abalanzó sobre el.

Ambos comenzaron una pequeña pelea dónde Caleb esquivo los ataques que el ave había comenzado a lanzar de forma continua con sus garras pero Caleb no perdió el tiempo y en la mitad mínima aprovecho su oportunidad para rebanar el cuello del ave.

Con esto hecho pude ver cómo las personas tampoco se mantenía firmes luchando con las criaturas intentado resguardar a quienes no podían pelear.

Sin embargo por muchos que mataramos parecía como si no tuviesen final al punto en que habíamos sudo rodeados en algún punto.

Atlas: esto se está volviendo ridiculo-dije mirando a las criaturas rodearnos antes de concentrar mana en mi hacha-¡¡ reciban el poder de la tierra !!-dije balanceando mi hacha en el aire creando varias púas de roca a nuestro alrededor que atravesaron a las criaturas.

Caleb: ¡¡ nada mal !!-con animo salto sobre la púas de roca cortando a algunas de las criaturas que sobrevivieron-aun así yo soy mucho mejor, [Percepción del rayo]-activando su habilidad salió del alcance de una de las águilas que estaba por golpearlo.

Los aventureros no se quedaron atrás ante el ataque de los monstruos, balanceando sus armas, usando la fuerza de sus puño o garras y algunos usando el poder de su magia, éramos un grupo improvisado de pelea pero estos monstruos eran bastante débiles y sus ataques eran prácticamente suicidas, todos solo buscaban morder así que sus patrones de ataque eran sencillos.

Claramente todos eran afectados por el rey demonio de la gula, no había otra explicación para que dichos monstruos atacarán un pueblo sin motivo.

Aunque también me hacía preguntar porque no habían leones en medio del ataque, pero este no era momento para pensar en cosas innecesarias.

Seguí derribando más monstruos unos tras otro y al darme cuenta había llegado a la entrada del pueblo donde a lo lejos una pequeña figura blanca diferente a las demás criaturas era visible.

Atlas: [Ojos del sabio]-dije mirando a la pequeña figura.

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