Sabía que iba a pasar.
Siempre que está con ellos cambia su forma de ser y está no era la excepción. Lo espere en el asiento y el solo paso, era como si fuera invisible.
No le di importancia porque sabía que iba a ser así, me dio más rabia ver cómo podían seguir con sus vidas después de arruinar una parte importante de la mía. Todos mis proyectos y dibujos importantes no se iban a sentir míos. Puede sonar exagerado pero los artistas me entenderían.
Cuando lleguemos a la escuela le voy a agradecer a mi papá por convencerme de venir a esta experiencia, puede que todo lo qué pasó con Steve fuera falso, una ilusión pero tristemente lo disfruté.
Disfrute tener un amigo por unos días.
-¿Quieres que me siente contigo?- Me pregunto Nat.
-No... gracias.- Le respondí con un tono de voz casi audible. Y esa fue la única vez que hablé en el camino.
Hacía frío pero la vista era hermosa, me puse mis audífonos y me puse a escuchar The Neighborhood en aleatorio y empecé llorar en silencio (mi pasatiempo favorito)
No se en que momento me dormí pero al despertar estábamos casi llegando y había un tráfico horrible en la ciudad. Ya no hacia tanto frío pero me dormí chueco y me dolía el cuello sin contar el hombro que no me dejo de molestar en todo el díaZ
Steve
Era un idiota. Me lo repetí todo el camino.
Bucky estaba solo unos asientos más adelante que yo y me sentía mal, me sentía horrible. Soy una persona de mierda y lo peor de todo es que no se como cambiar.
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Roommate with a broken heart
Teen FictionBucky Barnes un joven de 15 años con una vida difícil va a un viaje escolar a la ciudad de Nueva York y le toca compartir cuarto con un patan, Steve Rogers. Bucky solo se pregunta que estará pasando en la vida de su compañero. ¿En algún momento del...
