2da temporada (2)

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NARRADOR ONMISENTE

Con cansancio, abre sus ojos de manera lenta. La voz de su hermano, hace que bufe. Eran las seis de la mañana, y apenas había logrado dormir unas pocas horas, debido a estar toda la noche y parte de la madrugada despierto cuidando de la salud de su hijo.

—Joel, Will se despertó— Él rubio, suspira al no obtener respuesta por parte de su hermano.

Él rizado, se incorpora lentamente hasta quedar sentado en su cama. Talla sus ojos con ambas manos, mientras se levanta para abrir la puerta.

—¿A hora qué pasó?— Murmura con
cansancio.

—Will, despertó y al parecer tiene fiebre nuevamente. No deja de quejarse y
llorar— Joel, asiente mientras regresa a la cama para acostarse.

Zabdiel, abre sus ojos grandemente y lo mira confundido.

—¿Joel?, ¿qué demonios te pasa?. Te estoy diciendo que tu hijo está mal—

—Lo sé Zabdiel, lo he escuchado—

—Joel— Vuelve a exclamar negando lentamente.

—¡Ya cállate!, atiendelo tú si te dá la puta gana. Estoy cansado de toda esta
mierda— Él rubio, suspiró pesadamente.

Cerró sus ojos al recordar la fecha en la que estaban. Volvió su vista a su hermano, y lo miró con tristeza.

Ahora entendía su actitud.

—Hermano, Will no tiene la culpa de nada. Erick, no hubiese querido que estuvieras
así— Al escuchar el nombre del ojiverde, deja escapar el sollozo que había estado reprimiendo.

Zabdiel, se acerca y no duda en abrazarlo. Estaba consciente de como debía sentirse su hermano.

—¿Por-qué me tuvo que dejar, Zab?. ¿Por qué tuvo que tener a Will?—

—Era sus sueños, tener un bebé de los
dos— Joel, se separa del abrazo y niega.

—¡¿De que sirvió?, si nos dejó a
ambos!— Gritó, para comenzar a sollozar nuevamente.

Zabdiel, mantiene silencio sin saber que decir. Entendía que la situación por la que pasaba su hermano, no era fácil.

Un grito de dolor por parte de su hijo, hace que vuelva a la realidad. Detiene su llanto, para luego salir de la habitación y dirigirse a la del menor.

Al entrar, se encuentra al pequeño rizado, abrazando su cuerpo mientras sollozaba.

—Hijo, ¿qué tienes?— Llega a su lado, para luego tomarlo en sus brazos.

Will, solloza más fuerte apuntando su cabeza.

—Ya pequeño, ya pasó. Aquí esta papá, Joel
contigo— Él menor, se aferra a su cuerpo tratando de sentir su calor.

Minutos después, la puerta se abre dejando ver al rubio.

Zabdiel, los observa con tristeza. Admiraba de una manera increíble a su hermano.

Ése pequeño niño que sufrió de bullying por su condición de asma. Ése adolescente que cayó en las drogas y alcohol, y que salió de esa vida solo por amor.

Ese mismo amor, que ahora era causante de su dolor.

—Papá, Joel—

—¿Dime?— Exclama, mientras se separa de su hijo, dándole una pequeña sonrisa.

Chiquito (Joerick)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora