Contención

Capítulo 26

Sofía

Atrapada, dentro de mi propia cabeza. Una que no ayuda a saber que es cierto y que no. Vi, escuché y sentí cosas que no podrían ser reales, pero hay una que sí me queda claro que lo es.

Danna estuvo allí. Un súbdito del Káiser es lo que es o al menos quiso ser.

<< __ ¿Que tienes para ofrecer? - le preguntan.

__ Información a cambio de inmunidad para los míos. - responde con nerviosismo.

__ ¿Que clase de información? - algo entra por mi boca. Atraviesa mi garganta y no puedo ni luchar porque el control de mi cuerpo no lo tengo.

__ Con él candidato que quiere. El único que falta, Johan Gil quiere tener un almuerzo conmigo, no quiero nada con él, pero puedo sacarle información y hacerlo entrar con ustedes.

__ Sabes que al Káiser no le gusta que intenten buscarlo. De seguro sabe todo de tí, pero si no te ha invitado es porque no le interesas.

__ ¿Y esta... ¿Sofía sí? Tiene las mismas capacidades que yo. Ambas somos hábiles cuando se trata de hacer caer a alguien. - intento abrir los ojos, pero no es posible.

__ A la Valkyria la quiere desde que Braulio se la presentó. La ha seguido, la ha esperado, mientras que a tí...

__ No me vayas a rebajar ante esta puta. Su única forma de resaltar es abriéndole las piernas a todos. - suelta con desprecio. - Lo mejor es que la maten porque de seguro nada podrá evitar que los traicione.

__ ¿Cómo va a traicionar algo de lo cual no sabe que forma parte? - suelta una risa antes de continuar>>

Recorro el lugar con sigilo, Bruno me está esperando en el auto. Quiere que lo abrace, pero tengo en tanto que pensar que solo le doy una mueca. Sabe que los demonios en mi cabeza están jodiendome, golpeando y deseando hundirme de nuevo que no hace nada más que conducir.

Recuerdo haber visto a una mujer con mis mismos rasgos. Estar frente a dos tipos a quienes le ordenaron matarme. No recuerdo nada más que haber sido inyectada por un tipo mayor.

Su voz asquerosa diciéndome que no iba a poder escapar aún rompe las nubes que se quieren formar en mis ojos. Quiero olvidar, sabía que estaba mejor sin recordar nada, pero si no lo hacía tampoco sabría que la hija de perra de Danna siempre supo donde estaba.

__ ¿Estás bien? - la voz de Bruno me hace regresar a la realidad. - Sofía.

__ Estoy bien...estoy bien. - bajo la voz. Es algo que ni yo me creo, por ello detiene el auto. - ¿Que haces? Debo ir por...

__ Oye, puedes llorar. Si quieres hacerlo, no lo juzgaré. Has pasado por tanto que si te derrumbas no podría...

__ ¿A donde me ha llevado llorar? - me río para evitar que las lagrimas salgan. - ¿Que he logrado con eso? Nada. La vida se ha ensañado conmigo, Ronald se ha ensañado conmigo...todos tienen tanto contra mí que me siento como un blanco al que automáticamente quieren apuntar cuando me ven.

__ Sofía...

__ No, Bruno. Te recuerdo a tí, a Elisa no. - admito. - Tengo la mitad de todo. La mitad de mi vida, mi mente está mostrándome cosas que no entiendo totalmente porque no sé qué pasó ante o después.

__ Sofía. - detiene mis palabras. Paso saliva.

Cuando me dedica ese tipo de miradas es porque sabe que no puedo más, por ello dejo que me rodee con sus brazos. Me lleva contra su pecho, en un abrazo reconfortante. Me siento como un trapo al cual todos quieren patear, todos ven como un rival o alguien a quien golpear.