Mestizos (Unión De Mundos)

"Capítulo 39"

–¡Pss! ¡Psss! –Hacia ruidos para llamar la atención de una pareja que se encontraba escondida detrás de un mostrador.

Había visto una salida más cerca de donde había entrado, así que los llevaría hasta ella.

La joven volteo en dirección al ruido, viendo a James llamarla con una mano. Por un momento la chica con los ojos mojados desconfío de la menor, puesto que no mostraba su completo rostro.

Los pedazos del lugar aún seguían volando y uno de ellos estuvo a punto de aplastar a los jóvenes, de no ser porque James se dió cuenta y uso sus poderes de hielo para detenerlos formando un escudo a su alrededor.

–¡Aaah! –Gritaron al pensarse aplastados...

Al abrir de nuevo los ojos, vieron que un escudo hecho de hielo los protegia.

De nuevo James les dijo que vinieran y esta vez no dudaron ni un segundo en seguirla.

–¿Puedes tomar a esta cosita? Vi a una joven en silla de ruedas, iré por ella.

Dejo al bebé en manos de la chica y corrió hasta la joven que pedía ayuda desde el suelo, no podía caminar y ni siquiera arrastrarse puesto que una viga estaba aplastando sus pies.

–¡AYUDA POR FAVOR! ¡Ayuda! –pedia a gritos.

La peligris llegó a ella. La joven en el suelo se sintió aliviada de que alguien estuviera ahí para ayudarla.

–¡Ssh! Tranquila, ya estoy aquí. –Ni en sus más remotos sueños había pasado algún día decir eso para calamar a alguien justo antes de rescatarla.

La chica se callo, ninguna quería llamar la atención de aquel sujeto y mientras estaba ocupado con el otro sujetó decidió actuar.

Reviso la viga buscado una forma de deslizarla, sin embargo, estaba muy bien aplastada y la única forma de sacarla era levantar la viga y después jalarla.

Miro a todos lados, tal parecía eran los únicos dos en ese momento.

–Volvere, no tengas miedo.

–No, no, por favor no me dejes aquí.

Pese a sus súplicas James la abandonó momentáneamente para ir en búsqueda del chico que dejó escondido anteriormente.

–Ven conmigo, necesito tu ayuda.

El chico dirigió una mirada a su novia, la cual únicamente asintió, y lo dejo marchar junto a James.

Llegaron de nuevo hasta la mujer y la menor dió instrucciones de que en cuanto levantará la viga, alara de ella y la sacará de ahí.

Un poco dudoso el joven, pues la viga era muy grande y pesada, dudando que una pequeña como ella logrará levantarla, accedió a hacer lo que ella decía.

Una vez posicionado todo, James puso sus manos debajo de la viga y con toda la fuerza que le permitía su cuerpo de momento, impulso hacia arriba...

Era quizá mucho más pesado de lo que había imaginado, pues casi no lograba levantarlo del piso... Un intento más y sacando nuevas fuerzas que provocó sus venas se marcarán y su cara enrojecer, logro lo que había pensado..

La viga finalmente cedió y el chico pudo sacar a la mujer atrapada.

Dejo caer la viga.

Sin esperar a más, James tomo en sus brazos a la mujer y junto al chico, la chica y el bebé salieron de aquella enorme tienda.

Con su ropa algo quemada y muy manchada, James logro rescatar a esas personas.

–Gracias, muchas gracias. –Decia la mamá de aquel bebé.