Anabelle Collins
Abrí los ojos y me encontré en el sofá, con Chris a mi lado abrazándome. Por un momento me quedé viendolo dormir, se veía tan tierno y en paz, examine cada parte de su rostro, desde sus ojos hasta sus perfectos labios.No me contuve y me acerque más a él para depositar en sus labios un mínimo beso que hizo que se moviera un poco, lo arruye con mi voz y me quedé mirándolo de nuevo con una mirada de tonta, pero como no podía verme me daba igual. Hasta que....
___No veas tanto, me pones nervioso- dijo bromeando sin abrir sus ojos.
Me quedé descolocada y le di un golpe en el hombro tratando de separarme de él, pero me agarró con ambas manos y me trajo aún más a su cuerpo, de forma que mi cara quedó totalmente clavada en su cuello.
___Uno no puede ser romántica porque te agrandas, ¡Dios mío!- le reproche.
El soltó una carcajada y yo lo ví como vería un hermano mayor a su hermanito cuando le mete chisme a sus padres. Con recelo y lujuria.
___¡Uy! Si las miradas matarán- soltó casi ahogándose en risas.
___¡Cállate bestia!- bufé, siguiéndole el juego.
Pensé que iba a replicar, pero se limito a verme, como un nerd vería una fórmula perfecta. Como si fuera la creación más única del mundo .
Le puse los ojos en blanco y el me sujeto la mandíbula y mordió mi labio, y pues... Yo quede con ganas de más, así que me sente en sus piernas y comencé a besarlo con apresuró, deseo y mucha determinación. Cada día sus besos me volvía más adicta a el, y no se hasta cuándo pueda soportar no tenerlo completamente.
Todo iba muy placentero, hasta que por algún motivo se separó bruscamente de mi y bajo la mirada como con pena. Y al voltear mi rostro, me encontré con mi madre quien está viéndonos boca abierta y con una expresión de que estaba viendo su novela favorita.
__¡Mamá! Pa-pareces un fantasma.
Inmediatamente me senté rápido en el otro sofá, mientras me moría de vergüenza.
__¡Oye! ¡Más respeto, soy tu madre!, además no ví mucho.
Se cruzó de brazos y cambio su expresión de asombro a ofensa.
__Igual mamá, me asustaste... Nos asustaste- le replique, mientras veía de reojo a Chris, quien estaba peor que un tomate.
__¡Exagerada, ni que nunca hubiera visto a una pareja traspasarse saliva!__ añadió restándole importancia__ Es algo normal que se besen, son esposos...Cierto,Chris?
Ambas lo miramos y el pobre no sabía cómo sacar las palabras de su boca.
Iba a decir algo pero se detuvo en seco, al ver la hora en el reloj que estaba en la sala.
__¡Joder! Es tardísimo__ soltó parándose exaltado del sofá.
Mamá y yo miramos confundidas.
__¿Tarde? ¿Para que?__ pregunté algo desconcertada.
Ví a mamá y luego a el, buscando una respuesta de alguien.
__No te acuerdas? Tenemos que ir a la gala, y ya tenemos una hora y media de atraso__ Dijo, haciendome recordar. Mientras se acomodaba supongo que para irnos.
__¡Cierto! Debemos irnos, o llegaremos súper tarde.
Comencé a buscar mis cosas para guardarlas en mi bolsa y poder irnos.
__Mamá, ya tenemos que irnos, despídeme de papá porfavor. Y ya deja de presenciar besos ajenos ok?__ le pedí mientras le daba un brazo.
__No te prometo nada__ susurró en mi oído, para luego verme coqueta.
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For you, for me.
RomanceAnabelle Collins, la chica de los atardeceres, Christopher Davis, el chico de la playa. Unidos por un lazo, que va más allá de un acta de matrimonio. ¿Quién diría que leer en la playa, y ver los atardeceres, pueden llevarte a conocer al amor de t...