Capítulos díez

1.6K 118 8
                                    

Aurora

Cuándo desperté estaba sola, sólo con la sensación de Daemon en todo mi cuerpo y en toda mi habitación. No sé cómo se las arreglaba para que nadie lo viera e incluso las cámaras pero tendría que preguntarle. Cuándo caminé al baño mi entrepierna dolió, me había entregado a él por voluntad propia, por qué me gustaba pero me sentía culpable, sentía todo erróneo y el sabor del arrepentimiento me lleno la conciencia. Nos habíamos duchado durante la madrugada me tomó nuevamente en la ducha, cambio las sábanas y se acostó conmigo y desperté sin él.

Hice mi aseo habitual y fui por mi celular marcando el número de Magda. Ella contestó al tercer tono.

—Tenemos que reunirnos.

Decidimos encontrarnos fuera de casa, en un restaurante para almorzar. Daemon me acompañaba y apenas nos habíamos mirado cómo si ambos hubiésemos intentado borrar lo qué pasó.

Yo no podía borrarlo, jamás lo haría.

La terraza del restaurante estaba decorado de una manera hermosa, con parasoles abiertos sobre la mesa para cubrirnos del sol, Magda llevaba lentes oscuros y un sabor amargo de enojo me llenó el cuerpo.

—¿Lo volvió a hacer?— preguntándole inmediatamente se sentó frente a mí, llevaba un vestido azul marino, el cabello suelto y noté un ligero corte en su labio.

Maldito.

—Solo estaba enojado.

—Deja de justificarlo, no tiene derecho a ponerte una mano encima solo por estar enojado.

—Tu hermano lo hizo.

—Si— el corazón se me apretó— estaba drogado.

—Tú también lo justificas, de eso se trata este mundo de mierda. Para eso nacimos, ellos cuidan nuestra virtud porque es lo único puro que tienen en sus vidas llenas de pecado, ni todas las vírgenes del mundo podrían mantenerlos libre de pecado. Nos cuidan, nos crían para ser buenas esposas, madre e incluso callar ante nuestro esposo.

—Ya no soy virgen— le dije y un peso se liberó de mis labios— tomé una decisión por mí, yo…

Decirle que huiría la podría comprometer, su la famiglia se entera que ella sabía de mi plan podría acusarle de traición y con ella la muerte, no podría hacerle eso a ella o a Noelia. Jamás.

—Daemon fue caballeroso conmigo.

—Siento que oculta algo, no debiste escucharme.

Mi estómago se siente pesado.

—Ya es tarde para eso.

—Escuché que tu padre lo tiene entre ceja y ceja.

—Por Thony, sí — admití— me gusta él, conmigo es tan diferente.

—Disfrútalo, estarás casada dentro de poco. No lo olvides.

Cómo podría olvidar a mi prometido Tekashi.


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Beautifull Monster Donde viven las historias. Descúbrelo ahora