Luar [Omegaverse KookV]

Segunda Temporada | VII

Los siguientes días fueron una locura para la familia Jeon y Wang, pues a Myung y a Jia se les sincronizó el celo el mismo día que a Bora, junto con Ara, pero al ser alfa esta última, no la pasó tan mal como sus primas. Jack, Jungkook y Yoongi estuvieron en casa de Namjoon y Seokjin, pues aunque Ara no estuviera mal, le avergonzaba un poco que su padre estuviera ahí. Para Kai y Soobin era como navidad, ambos emocionados y felices de poder estar con sus tíos entrenando todo el día.

Jungkook se la pasó con sus trillizas quienes ahora parecían tener papitis. No lo dejaban ni ir al baño solo y querían estar todo el tiempo en sus brazos, acurrucadas o sólo sintiéndolo y Jungkook se sentía el papá más feliz del mundo por lo popular que era entre sus hijas, pues sabía que en cuanto volvieran a ver a Tae, se olvidarían de que tenían padre.

Luego de un largo rato, Jungkook consiguió que sus cachorras durmieran de nuevo, aún era demasiado temprano para que quisieran andar corriendo por todos lados, si tenían suerte, las niñas despertarían en casa con mamá, para ese momento Bora ya debería estar terminando su celo, Yoongi y Jack ya habían regresado a casa.

-¡Hey! -saludó Jungkook con una sonrisa a su hijo cuando lo vio entrar todo sudado y con unos palillos en la mano, reconoció inmediatamente lo que estaban aprendiendo a hacer. -No te he visto en días. ¿Cómo te fue?

-¡Muy bien, papá! -contestó Kai feliz. - He estado entrenando muy duro...

-Puedo verlo, Kai. -Reconoció Jungkook con una sonrisa enorme.

-Es que quiero que también estés orgulloso de mí. -dijo el cachorro mirándolo a los ojos.

-Mi amor, sí lo estoy. -le corrigió Jungkook con una voz suave.

-Quiero que me puedas ver como un alfa. -contestó Kai y Jungkook supo exactamente por qué decía eso o más bien por quién lo hacía. No era un secreto que cuando Seong-Jin se presentó como alfa, Jungkook no dejaba de hablar de él como su máximo orgullo y se escuchó a sí mismo en todas esas ocasiones en las que hizo una distinción notoria entre su hijo alfa y Kai. No lo diría en voz alta, pero secretamente, él nunca quiso que Kai fuera alfa. Sabía lo que involucraba que lo fuera y no podría soportar que uno de sus hijos muriera por el liderazgo del otro, por eso le era mejor que Kai se presentara como omega, cosa que no sucedió, pero con Seong-Jin fuera, eso ya no tenía qué preocuparlo.

Jungkook tragó pesado sin saber exactamente qué decirle, así que sólo inclinó su cabeza en señal de respeto a su hijo, Kai había demostrado en más de una ocasión ser un alfa sensato y justo. Recordaba algunas cosas que le dijo cuando estaba enfermo y sabía que si Kai se quedaba con la manada, llegado el momento, ésta tendría un mejor líder que él y su padre, tal vez era hora de comenzar a prepararlo para eso... - Hasta los guerreros más fuertes necesitan descansar. Ven, preparemos leche de banana para que me cuentes cómo ha sido tu entrenamiento y discutamos, de alfa a alfa, cómo empezarás a atender responsabilidades de la manada.

Kai sonrió emocionado y sus ojos se llenaron de ilusión, sería la primera vez que su padre hablaba con él de alfa a alfa así que lo siguió alegremente hasta la cocina escuchando muy atentamente todo lo que este tenía para decirle. Y mientras padre e hijo compartían un rato juntos y sólo para ellos, en la casa del líder, Taehyung terminaba de acomodar el cuarto de Bora. Esa mañana la joven omega había despertado sintiéndose mucho mejor, su celo había terminado y con un baño estaría como nueva.

-Tae, buen día.- saludó Wooshik desde el pasillo, en los últimos días había tenido pase libre a esa casa por si el castaño o su hija necesitaban algo. -¿Cómo está Bora? Traje el desayuno de ambos, debes estar hambriento.