Tercera Temporada | VII

227 22 5
                                    


El corazón de Jungkook se detuvo en ese momento. Por un segundo abrazó más fuerte a sus hijos y luego se incorporó para encarar a su cuñado, su semblante parecía tranquilo, pero le suplicaba que todo se detuviera con la mirada. -Iré a hablar con tío Yoongi y después iremos a casa para comenzar a prepararnos para despedir a Hyunjin y a su hermanito ¿De acuerdo? -Dijo a sus hijos con una voz suave, los niños se quedaron en silencio viendo a su padre irse, lo cierto es que no querían estar más lejos de ellos, pero entendían, al menos Bora y Kai, que Jungkook tendría mucho trabajo de líder en esos momentos.

Yoongi era su mejor amigo y el esposo de su hermano, aunque quería derrumbarse con él, no podía hacerlo en ese momento, no cuando sabía cuánto lo necesitaban entero ahora. -¿Qué sucede? -preguntó tranquilamente, aunque por dentro estaba muerto de miedo y su corazón latía con prisa, no quería que nada malo le pasara Taehyung y sólo podía pensar que lo que sea que tuviera que decirle su cuñado, tenía que ver con él.

-Es Seungmin, lo encontraron muerto en su casa.- soltó al fin Yoongi. -Uno de los curanderos lo revisó, fue una muerte natural, o mejor dicho, fue consecuencia de lo que le pasó a Hyunjin. Era su destinado.

El mundo entero se le vino encima a Jungkook. -Mierda. -masculló. De toda esa situación no veía una salida pronto. Ahora menos que nunca podía derrumbarse, no se trataba sólo de su familia, si no de las familias que estaba arrastrando con sus malas decisiones, sin mencionar que unos segundos atrás le aseguró a sus hijas que no le pasaría nada a su madre. Seungmin había muerto apenas unas cuantas horas después que Hyunjin. Quería vomitar. - Iré a hablar con los padres de Seungmin para que estén juntos. -Jungkook suspiró antes de retomar la palabra. - Sé que ya les he pedido muchas cosas y que Jimin y tú también tienen un duelo y tienen que hablar con su cachorra, pero ¿Podrían acompañar a mis hijos a casa para que se preparen? -preguntó apenado.

Yoongi se acercó a su amigo y le dio un pequeño apretón en el hombro. -No te preocupes por eso. Sabes que tienes y tendrás nuestro apoyo siempre.- dijo con una pequeña sonrisa. -Iré con los cachorros.- anunció sobando uno de los brazos de Jungkook y luego se retiró. Lo mejor sería apresurarse y quizá darle un momento para respirar al líder pues ya habían sido demasiadas emociones.

Yoongi entró de nuevo a su casa, Jimin se encontraba en la sala con su pequeña quién tenía algunas lágrimas en los ojos, aparentemente ya le había contado lo que pasó con su tío Hyunjin así que en cuanto lo vió se levantó para abrazarlo con fuerza.

-Quiero ver al tío Youngbok y a mis abuelos.- pidió Ara con tristeza.

-Los veremos, estaremos con ellos más tarde, pero primero debemos prepararnos y ayudar a tus primos a qué también se preparen... Ara, no sé si mamá te lo contó pero ellos también están pasando una situación difícil.

Ara alzó la cabeza para ver a su papá y luego observó a su madre. -¿Qué pasó?- preguntó con cierto temor.

-Ara.- la llamó Yoongi y se agachó a su altura. -Pasaron muchas cosas y lamentablemente el bebé que tu tío Taehyung estaba esperando también fue llamado por nuestra Diosa...

La pequeña alfa abrió los ojos con sorpresa, miró a su papá y luego a su madre. -¿Por qué?

-Bueno, princesa, a veces pasan cosas que no queremos o no podemos explicar. -Intervino Jimin, adoraba a Yoongi con su vida entera, pero sabía que suavizar las noticias no era su fuerte y ahora mismo no necesitaban que los cachorros estuvieran asustados. -La Diosa tiene formas de actuar que nosotros no podemos comprender siempre, tío Taehyung está enfermo en la curandería y eso le hizo daño al cachorro, por eso la Diosa prefirió que regresara con ella, para que él no estuviera enfermo aquí, pero eso no es culpa de nadie ni quiere decir que tu tío no hizo un gran trabajo, al contrario, tuvo a un bebé tan precioso, que la Diosa lo quiso con ella. -Explicó el omega con una voz suave acariciando las mejillas de su cachorra. - No quiere decir que no puedas estar triste, Ara. Si quieres llorar con Bora o acompañarla en silencio, puedes hacerlo. Hay que ser muy respetuosos con tus primos, ¿Sí? La están pasando mal, mi amor. ¿Qué hace mamá cuando papá tiene un día malo? -le preguntó con una sonrisa pequeña.

Luar [Omegaverse KookV]Where stories live. Discover now