Parte 16

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—Ya lo escuchaste, es una pena.—sonrió malicioso Seo Joon.—Te haré un favor Jungkook, si te portas bien por los viejos tiempos...será una muerte rápida.

—¡No lo toques Seo Joon!

—Tráiganlo, tal vez quiera despedirse.—agitó una mano.

Todo el cuerpo de Jungkook se tensó cuando vio a Jimin. Su ropa estaba sucia, su cara golpeada y no podía caminar bien, su pie izquierdo estaba lastimado. Habían tapado su boca con cinta y la mirada de terror le revolvía el estómago al alfa. Su dulce chiquillo estaba temblando y  aterrado.

—Quítenle la cinta, tal vez quiera despedirse.—uno de los hombres le arrancó la cinta de los labios a Jimin.

—¡No he hecho nada malo, déjenme ir!—chilló histérico.

—Déjalo ir, si dinero es lo que quieres te daré el doble que Do Yun y te dejaré llevarme con él para que cobres la otra parte.

Seo Joon ladeó el rostro sonriendo burlón.—Eso suena bien, pero lo siento no me haría un elemento confiable. No te preocupes, no le dolerá.

-¡No lo hagas!

Seo Joon soltó el seguro de su arma y apuntó en la cabeza al omega que se retorcía  histérico tratando de liberarse de los hombres que lo sujetaban...El ruido de un disparo lleno la habitación.

Había sido un disparo antes de que Seo Joon jalara el gatillo. Una ráfaga de disparos inundó el lugar segundos después, venía de las ventanas laterales.

Jungkook observaba con furia al hombre retorcerse de dolor, alguien le había disparado en la mano antes de que pudiera jalar el gatillo para matar a Jimin..

Ruidos de autos se escucharon afuera mientras los hombres de Seo Joon se escondían y disparaban hacia las ventanas.

Segundos después las puertas del gimnasio fueron derribadas por la gente de Namjoon. Hoseok fue hacia su primo, mientras los demás cubrían sus espaldas.  Cuando llegó hasta él, los llevó a un rincón arrastrando la silla a la que estaba esposado.

-¡Hoseok!—gritó Jungkook.—el hombre de chaqueta café, el tiene las llaves de esta mierda.

Hoseok vio al tipo escondido detrás de un saco de box.—Lo tengo.—apuntó su arma y espero paciente a que el hombre asomara la cabeza para disparar, segundos después,Hoseok lo mató.

—Quédate aquí iré por las llaves.

—Jimin ¿Donde diablos está?

—Yoongi lo está cubriendo, está bien. No faltan muchos y saldremos de aquí.

—Déjame al jodido Seo Joon.—gruñó Jungkook.

—Un placer.—sonrió Hoseok antes de correr al cuerpo del hombre que tenía las llaves.

Jimin estaba rodeado de cinco alfas que lo cubrían y disparaban hacia los hombres de Seo Joon. No eran novatos, eran profesionales que recibían la orden de proteger un objetivo y lo hacían.

Los disparos cesaron justo antes de que Hoseok liberara a Jungkook. El alfa se levantó tomó sus cuchillos y escaneó el lugar en busca de Seo Joon.

Giró justo cuando Seo Joon intentaba escapar por una puerta lateral. Tomó un cuchillo y lo lanzó al hombro del alfa que se retorció de dolor y no pudo escapar.

—Tráiganlo.—ordenó.

Los hombres lo arrastraron hasta sus pies.

-¿De verdad pensaste que tenías el premio gordo aquí?—lo tomó del pelo para levantar su cabeza.—Solo un idiota como tú puede intentarlo...te dije que no lo tocaras y lo hiciste.  Ahora, sabrás por qué me llaman así ¿no? Es una lástima que no tengamos mucho tiempo, eso no quiere decir que vas a morir tan fácil. Voy a explicarte—dijo girando uno de los cuchillos en sus manos.

—Voy a cortar partes específicas de tu cuerpo, eso va a causarte mucho dolor, pero no va a matarte tan rápido, tardarás aproximadamente unos cuarenta minutos en desangrarte. No vas a poder caminar o arrastrarte. Mientras eso sucede quiero que pienses en tus malas decisiones, como traicionar a mi hermano o tocar a mi omega...bien, interpretaré tu silencio como la señal.

—Tu y tu hermano son unos idiotas, no pueden ser mafiosos con ideales.—murmuró Seo Joon.

—Sosténganlo.—ordenó a los alfas ignorando las palabras de Seo Joon.—Jungkook tomó el cuchillo más pequeño y comenzó a cortar el cuerpo de Seo Joon. Primero hizo incisiones en sus piernas mientras el hombre se retorcía y la sangre comenzaba a salir lentamente. Después hizo algunos en abdomen pero los gritos de dolor ya comenzaban a ser desgarradores.

—Joder, eres de los ruidosos.—chasqueó la boca.—Debí haber comenzado por ahí.

Jungkook rebanó su lengua. El corte fue tan preciso que la sangre no salía a chorros, salía lenta. Después cortó la piel de sus brazos.

Ignoró los sonidos a su alrededor, manteniendo  fija su atención en el trabajo como si estuviera poseído, tardó unos diez minutos en hacerlo.

—Eso es todo.—se levantó y limpió la sangre de sus manos en la ropa de su víctima.

—Es hora de irnos Kook, si Seo Joon le dio la ubicación a Do Yun, no tardara en llegar su gente.

-¿Dónde está Jimin?—Jungkook levantó la vista y encontró al omega tembloroso hecho un ovillo en una esquina del lugar.

Caminó hacia él pero a medida que se acercaba Jimin se arrastraba más lejos de él aterrado.

—Bonito, es hora de irnos.—murmuró agachándose.

—No—sollozó el omega histérico.—No te acerques.

Jungkook apretó la mandíbula, por supuesto que Jimin iba a temerle. Había masacrado el cuerpo de Seo Joon enfrente del chiquillo, mostrándole el verdadero monstruo que era.

—Yo lo tomaré.—dijo Yoongi.—El chiquillo te tiene miedo y tenemos que irnos ya.

Jungkook frunció el ceño y observó como Yoongi cargaba el frágil cuerpo del omega y lo llevaba a una de las camionetas.

Jungkook quiso seguirlos pero Hoseok lo detuvo tomándolo del brazo.—No creo que sea buena idea, está cagado de miedo. Dale un poco de tiempo.

Jungkook pasó una mano por su rostro.—La he cagado.—apretó la mandíbula.

Monster in love Where stories live. Discover now