Capítulo 55

1K 89 12
                                    

Aquí narrando nuestro querido Lancito <3 

Lance...

Maldigo por mis adentros al ver cómo sus ojos me miran con ápice de dolor cuando salgo de mi trance. Melanie no dice nada pero su expresión me lo golpea duramente.

¿Qué está pasándome?

Intento retenerla pero cuando decido hacerlo ella me ha dejado solo en la sala con todo el peso del remordimiento encima.

¡Soy un imbécil!

Pateo el aire y me dejo caer en el mueble que ella odia. Necesito hablarlo con mi abuela, necesito que me dé consejos. Estoy causando daño a la infiltrada sin querer y no quiero que sufra a mi lado.

¡Soy un puto bastardo!

Anoche le dije a ella que me había sacado del mundo que vivía y le acabo de llenar las cabeza de dudas por mi culpa y mi falta de resistencia.

Quiero aclarar que la chica que trajo la insoportable de Alynna me vislumbró pero no causó más efecto que de asombro. Por mi mente no paso ningún pensamiento impuro como solía hacer cuando veía a cualquier mujer de esa índole.

Lo juro.

La chica era muy sexy pero no movió ninguna fibra de mi cuerpo y mi amigo que está en medio de mis piernas estaba más dormido que un perezoso. Si Melanie jamás se me hubiese atravesado en mi camino desde hace rato tuviera a la latina debajo de mi follandola sin piedad.

Estoy verdaderamente jodido. 

Nunca imaginé que mi vida de mujeriego iba a jugarse en contra mío algún día. Ahora las mujeres con quien estuve están apareciendo de la nada y me causa gracia porque lo hacen justo cuando estoy tomando la vida en serio.

Debo hablar con la abu. Ella es las experta en estas cosas. Quiero que me diga que debo hacer para dejar de lastimar a mi chica y dejar de embobarme con las mujeres.

Bigotes se sube a mi barriga dándome un susto hijo de puta y la presencia de Alynna junto a su amiga me propinan otro.

—Estamos haciendo una pijamada ¿te unes?—miro a Alynna quien tiene un pijama de encaje puesto muy corto y después a la amiga que solo viste un camisón medio holgado que se ajusta a sus anchas caderas.

—No—contesto frío apartando la mirada de las dos—.No tengo cinco años y ustedes tampoco. Maduren..

—La zorra va a participar—me levanto del sofá enfurecido y la confronto. No me importa que sospeche lo nuestro no voy a permitir que insulte a mi infiltrada y menos delante de mi.

—No le llames así— advierto y mi voz no suena nada amigable, ni una gota, y su amiga lo nota.

—¿Y como se le llama a las personas que andan buscando a su ex?

—¿Ex?—repito descolocado—.Jamás tuvimos algo Alynna.

—Porque no quisiste—dice segura —.Porque te dio miedo expresar lo que sentías por mi y preferís huir en vez de afrontarlo.

 Me río en su cara y la miro con pena.

¿De verdad está mujer creería que yo sentía una mínima gota de amor por ella?

¿Qué carajos tiene en el cerebro?

—Jamás tuvimos algo — aclaro poniéndome de pie, dándome cuenta lo pequeñas que son ambas—.Fue solo sexo y lo sabes. La única que se equivocó aquí fuiste tú.

—Tu me quieres solo que no lo quieres admitir—vuelvo a reírme en su cara y niego con la cabeza —.Tu me hacías el amor como nadie y eso se siente Lance.

Y Llegaste Tú| Terminada| CorrigiendoWhere stories live. Discover now