Todo por amor

Capitulo 37

Llevamos una semana aquí y Daniel dice que vamos a otro lugar pero no se a donde. Hago mis maletas y guardo lo que compré esta semana. Cuando comemos vamos hacia el avión y escucho. " Avión con destino a Hawaii" Lo miro extrañada porque yo nunca habría ido. Pero ya no había marcha atrás. Me relajo y disfruto del viaje. Al bajar del avión, nos dirijimos a un grandioso hotel. Está la parte de los solteros y la otra de los casados. Subimos a la habitación y vemos que tiene unas vistas increibles. Me pongo el bikini y bajo a la playa a tostarme un ratito. El sol arde y al salir de la playa estoy quemada.

Al día siguiente. Vamos a una discotecta en la parte de los solteros. Y hacemos como una pequeña apuesta de quien consigue más numeros de telefono. Me acerco a un grupo de chicos muy monos. Y consigo el numero de tres y me río tras las caras que se quedan a ellos porque le e contado la apuesta. Así que me ayudan y me dan más telefonos. A media noche me hace gracia porque me pido un mojito (sin alcohol) y Daniel se pone rojo de la rabia. Y viene a mi, me agarra y yo absorbo un poquito de mi super mohito.
- Pero tu estas loca?- me grita- Esras embarazada y tu bebiendo. Pero de que vas?- Me dice con furia.
- Prueba un poco.- Le tiendo el vaso. Y cambia la expresión de la cara. Y se echa a reir.

Ya son la dos de la mañana. Regresamos porque me siento agotada. Al estar frente a frente en la cama. Miramos los númeroa a ver quien tiene más. Efectivamente yo. Y por su careto estará pensando en como lo hice. Pero yo solo le saco la lengua. Ja ja.

Por la mañana al despertar, me voy abajo a comer tortitas por que me apecen mucho. Así que no pierdo el tiempo y bajo. Después me dirijo a pasear por la arena de la playa. Pero me interrumpe el echo de que la melodía de mi Smartphone sonara. Es mi madre. No se que querrá. Lo cojo y para mi sorpresa es Dylan. Que se lo llevan a Eurodisney para que el también tuviera vacaciones. El niño lo ha pasado bastante mal. Pero paso a paso lo lleva todo bien...

Después a la cabo de un rato. Me llama Daniel. Que donde estoy. Sentada en la arena de la playa. Aburrida. Pero estoy bastante tranquila. Me meto en mis pensamientos. Y dentro de unos días de vuelta a casa. Alguien me tapa los ojos y me susurra.
- Señora pelotuda- dice con un acento gracioso.- Porqué salió del hotel sin mi?- Termina de decir.
- Necesitaba estar sola.- dije tranquilamente.
Se sienta a mi lado y me da un beso fugaz. Soy feliz a su lado. Y me hizo gracia porque llegué a pensa que no lo volvería a ser....