Capítulo seis: NoNilo

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Somos lo que somos por distintas razones y quizás nunca sepamos una de ellas.




En cuanto Caroline salió de la ducha, se cambió y terminó de arreglarse, el bar estaba en un sótano de un edificio. La música se escuchaba casi como un susurro y juro que nunca en mi vida había escuchado eso pero me parecía un sonido armonioso y agradable. Caroline me miró de reojo y sonrió, fuimos a la barra y pedimos unos tragos aunque, en realidad, eran ambos para Caroline porque yo no tomaba alcohol. Nos sentamos en las mesas con dos sillones a los lados uno frente al otro y yo miraba por la ventana. Estuvimos sentados hablando, cosas al azar, la verdad es que no sé bien qué hacíamos ahí. Sinceramente estaba más relajado de lo que lo estaba en el departamento pero no tenía una buena espina de ése lugar y no sabía por qué. Antes de salir del departamento le dije a Caroline que si no me sentía bien le haría una señal para irnos y ella aceptó.

-Hola chicos -Dijo una voz a un lado de la mesa, los miré y era el chico de la librería con otro chico más -. ¿Podemos sentarnos? -No contestamos nada pero igual lo hicieron, el chico de la librería se sentó conmigo y el otro con Caroline -. Por cierto, me llamo Pier y él es Theo -Dijo señalando al otro chico.

-Somos hermanos -Dijo Theo -. Sé que no lo parecemos por la fealdad de mi hermano y la belleza que me caracteriza pero así es.

-Eres la persona con más autoestima que conozco, Theo... -Pier parecía un poco más amigable de lo que parecía en la tienda -. ¿Saben por qué éste lugar se llama "NoNilo"? -Añadió señalando al cartel luminoso en la barra.

-¿Por qué? -Le pregunté fingiendo intriga.

-En el pasado, los egipcios identificaban a sus magos porque no podían beber del Rio Nilo, los magos iban a beber un agua un poco especial en otro lugar, fue uno de los primero bares que existieron -Yo asentí como si me interesara de lo que hablaba y él sonrió.

Caroline parecía tonta mirando a los hermanos, había hablado con Pier por teléfono un par de veces pero solo quedó en hablar porque nunca se vieron. Ella miraba a Theo y parecía que creía toda la confianza que él se tenía.

Después de las simples preguntas de siempre ¿Dónde viven? ¿Cuántos años tienen? ¿Viven solos? A lo que ellos contestaron primero, vivían en el centro de la ciudad, Pier tiene 21 y Theo 19, viven con sus padres y otros hermanos en una casa muy grande.

-Nosotros vivimos en un departamento en el centro, en realidad, era de mi abuela o lo sigue siendo, no lo sé. Lo tenemos por unos meses y después volveremos a casa -. Pier y Theo intercambiaron miradas.

-¿Cómo es el nombre de tu abuela?

-Nina, ¿Por qué?- Pier se tensó, por un segundo su expresión de seguridad cambió a miedo o, tal vez, misterio.

-¿Me acompañas al baño? -Me preguntó Pier.

-¿Eh? ¿Perdona? -Le dije negándome, me tomó por el hombro y me hizo una disimulada seña de que mirara a Caroline y Theo, ambos estaban hablando muy cerca y no prestaban mucha atención a lo que estábamos haciendo nosotros.

-Vamos -Lo seguí entre las personas, esquivándolas, no había notado la cantidad de luces flúor que había en el lugar y que de repente se haya llenado de gente. El lugar estaba totalmente decorado con una especie de idioma antiguo o runas, no lo sabía bien, algunas personas nos miraban cuando pasábamos entre ellas. Su cara no era del todo normal, no sé cómo describirlo pero había algo que las hacía raras, con esto no quiero decir que no fueran lindas personas, sólo que sus caras tenían algo raro, cada una de ellas y sus miradas, tal vez eso era, sus miradas eran raras.

El camino hasta el baño era bastante largo, teniendo en cuenta que estábamos en la otra punta, me pregunté si Caroline notaría nuestra ausencia y también para qué me esté llevando Pier hasta el baño. El contraste de su pálida piel con los tatuajes hacía que llame mucho la atención, estaba vestido con una remera blanca con letras grises que desde atrás se veía la gran complexión de su espalda, los bíceps se le apretaban a las mangas de la remera y se llevaba muchísimas miradas. Veía el baño a lo lejos pero él no giró hacía allí, giró para la escalera que estaba a un lado, subimos la escalera y entramos en un cuarto totalmente a oscuras, parecía una tienda de herramientas y casi no se veía nada.

-¿Quién eres? -Me preguntó, algo brusco, me empujó contra una de las vitrinas y me tomó por la muñeca.

-¿Qué? ¿Qué te pasa? ¡Ya te dije quién soy! ¿Estás drogado? -Relajó un poco la fuerza de su mano, pero su expresión seguía igual, parecía frustrado y confundido.

-¿Cómo llegaste aquí? -Me solté de su encierro.

-Sólo llegamos, Caroline buscó de entre los bares que mi abuela dejó y solo eso -. Yo también comenzaba a enfadarme por no entender lo que sucedía -. ¿Qué pasa?

-¿Ves esto? -Alumbró sus ojos con una linterna y estos brillaron, había visto eso pero no recordaba dónde, traté de ignorarlo, sus ojos estaban brillando, realmente, brillando y eran aún más verdes de lo que ya eran.

-No me importan tus lentes de contacto, suéltame, Pier -Le dije un poco enojado, aunque no podía dejar de pensar en la manera que le brillaban los ojos y trataba de recordar en dónde había visto eso.

-No puede ser que hayan llegado aquí por coincidencia, ¿Sabes quién era tu abuelo? -Ésas palabras me chocaron fuerte, no pretendía hablar con él éste tipo de cosas y mucho menos en un lugar oscuro apartado de todos.

-No sé -Fue lo único que dije, me entristecí y pareció notar de que yo no entendía nada de lo que estaba hablando. Hubo un silencio incómodo, él solo me miró y después de unos segundos sin decir nada, habló.

-¿Quieres saberlo? -Se había acercado a mí y ya no estaba enojado, yo no contesté ¿Qué podría saber él sobre mi abuelo? Seguramente no lo conocía. Lo miré, le mostré el dedo y me fui.

Odio que las personas crean que saben cosas que tú no sabes conociendo más a esa persona que seguramente ellas ¿Se entiende? Yo no digo que conozca a mi abuelo, al menos, ya no lo conozco, tal vez, antes lo hacía pero ya no. Es como cuando se inventa un rumor tuyo y te enteras cosas que ni tú sabías que hiciste. En la escuela se habían inventado muchos rumores míos, uno de los más graciosos fue que yo estaba loco y quien sabe, tal vez lo estaba, pero ni yo sabía que en esos momentos estaba loco ¿Cómo los que inventaron el rumor lo sabrían antes que yo? ¿Cómo pueden conocerme si solo sabían mi nombre?

Llegué a Caroline, Pier me seguía el paso y disimuló cuando llegamos hasta la mesa.

-Caroline, nos vamos, ahora -Le dije mientras hacía el gesto que habíamos acordado que consistía en entornar los ojos repetidamente.

-¿Tienes un tick? -Preguntó Theo pero ignoré su pregunta.

-Vamos - Le dije, Caroline se levantó y se despidió de Theo, me sorprendió que no se hayan besado, solo se abrazaron y después de saludar a Theo me giré para mirar a Pier que parecía estar esperando un saludo, pero no lo saludé y salí por la puerta junto con Caroline a mi lado.

-¿Qué pasó? No me di cuenta el momento en el que se fueron...

-Sé, sé que no te diste cuenta, Caroline  Se giró hacía mí y me sacó la lengua -. Muy madura, en serio, muy madura.

-No me importa, ahora dime, ¿Qué pasó?

-Pier me acorraló en la tienda de arriba, me tomó por el brazo y me preguntó quién era. Yo pensé que estaba drogado, pero no lo estaba, luego nombró a mi abuelo y... -Caroline estaba escuchando o hacía que escuchaba, Caroline tenía un estado al que yo llamaba limbo. El limbo de Caroline era cuando se perdía en sus pensamientos mientras alguien hablaba, usualmente era por libros o algo así, pero esta vez estaba seguro que era por Theo -. Caroline limbo -Dije y me miró como si no hubiese notado dónde estaba. Le repetí la historia y se asombró.

-Wow, iba bien hasta la parte de que te acorraló, podría shippearlos -. El shipp era cuando las personas querían que otras personas que nunca estarían juntas, lo estén, en éste caso me molestó porque yo estaba enfadado en serio y Caroline lo tomaba en chiste, le lancé una mirada y se calmó -. ¿Cómo es que puede saber algo de tu abuelo?

-No lo sé, pero parecía saber algo y no sé si quiero averiguarlo...

Magicians Ashes  #Wattys2016Where stories live. Discover now