第56章

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"maldito, calum." el rubio murmuraba en voz baja mientras observaba con furia al par de muchachos que compartía un gran cuenco de helado.

"¿te gusta, bro?" el moreno preguntó sonriente luego de tomar una cucharada del exquisito manjar.

"me encanta. es mi favorito." contestó y miró el helado de menta con chispas de chocolate como si fuera el amor de su vida.

"me alegra escuchar eso. oh, tienes un poco de . . ." señaló su barbilla, intentando hacerle saber que traía una mancha de helado derretido. no obstante, michael no comprendió la indirecta.

"¿qué?" juntó sus cejas confundido.

"tienes . . . no, no importa." tomó una servilleta y procedió a limpiar la mancha cerca de la comisura de sus labios, con mucha delicadeza. "listo."

el teñido le agradeció con una sonrisa mientras los ojos de calum se alargaban hacia los lados, sonriendo también. michael no se arrepentía de la decisión que había tomado. ya quería a su nuevo bro. él estaba llenando poco a poco el vacío que tenía en el alma.

"mírenlos, parecen novios." el joven de cabello ondulado, ashton, comentó riendo. las tres muchachas en compañía se unieron después.

"no somos novios." michael negó. "somos bros." su tono sonaba serio, pues nuevamente nadie entendía de lo que se basaba aquella relación. calum asintió, en silencio.

a este punto, luke estrujaba el popote de su milkshake con tanto enojo que llegó a deformarlo.

"maldito, calum." dijo nuevamente.

el grupo de amigos continuaba charlando despreocupadamente, hasta que el sexto sentido de sarah se presentó en la mesa. siempre había sido una muchacha un poco paranoica, desconfiada. las manos le comenzaron a transpirar y tiritar.

"oigan, chicos." susurró tratando de tranquilizarse, aunque el aire se le hiciera escaso en el momento. "n-no miren hacia atrás pero, c-creo, creo que a-alguien nos está siguiendo." balbuceó, asustada.

así es, sarah se había percatado de un individuo extraño hace unas horas en el cine, pero le restó importancia. sin embargo, al darse cuenta de que aquella persona se encontraba también en la heladería, se le puso la piel de puntas. esto ya no se trataba de una menuda coincidencia.

"¿de qué hablas? ¿dónde?" calum dijo haciendo una mueca.

"¡no mires!" la pelirroja gritó.

michael forzó su vista y observó al supuesto sospechoso sin importarle las palabras de sarah. puso los ojos en blanco, puesto a que había reconocido al rubio. él mismo le había obsequiado aquella gorra negra que traía puesta en la cabeza. el teñido no entendía porqué luke se estaba comportando de esa forma. ¿acaso lo extrañaba?

pues muy mal. a michael le importaban tres pepinos.

"¿qué tal si se trata de un ajuste de cuentas? nos matarán porque hemos sido muy malos. oh por dios, moriremos." sarah ahuecó su rostro con las manos, despavorida.

"¿qué cosa mala podrías haber hecho tú, sarah?" becky no cuestionaba sus propios pecados , pero sarah, ella era una santa desde su criterio. la pelirroja meditó por un segundo.

"el otro día boté una envoltura de chocolate hacia la calle, becky, soy una mala persona."

"basta." michael interrumpió. "no es un delincuente." se puso de pie, suspirando ante la situación tan inverosímil. "sólo se trata de un idiota."

sus amigos lo vieron encaminarse hacia la mesa de luke, decidido a no actuar como un cobarde como el ya mencionado. el rubio, al notar que el teñido se dirigía hacia su dirección, se despojó rápidamente de sus lentes y gorra, y comenzó a silbar mirando hacia el techo, en un intento de hacerse el tonto perdido.

"luke." se paró al lado de su mesa, en su rostro no se podía apreciar ninguna expresión.

"oh, hola." sonrió nerviosamente y saludó con una mano. "el mundo es un pañuelo, vaya, qué tal coincidencia."

"vaya mentira" diría michael. la canción de 'why the fuck you lying' se reproducía en su cabeza. harto de su infantil comportamiento, bufó.

"¿qué haces aquí, luke?" se cruzó de brazos y retuvo las ganas de golpearlo.

"¿q-qué, qué clase de pregunta es ésa?" el rubio se tocó el pecho, supuestamente ofendido. "¿q-quieres sentarte?" apuntó hacia el asiento vacío paralelo hacia él.

"a decir verdad, tengo compañía." respondió indócil.

"ya veo . . ." bajó la mirada. fue una tarea difícil resistirse a aquella expresión furibunda que michael tanto detestaba mirar. pero no, esto no se comparaba a todo el daño que él le había ocasionado.

"no mientas, luke. ¿por qué estás aquí?" el tono duro de su voz mostraba clara la exigencia de la verdad.

"es una heladería."

"ya lo sé."

"vine a tomar un helado." respondió, su corazón latiendo a un ritmo anormal.

"deja de mentir."

"¿por qué dices eso?"

"eres intolerante a la lactosa."

"mierda." luke maldijo dentro de su mente. no había contado con ese detalle. había olvidado lo mucho que michael lo conocía.

"ya no tengo más ese problema. todos cambiamos." declaró, terco a seguir con su mentira. sintiendo un nudo en su garganta retuvo las lágrimas que causaban sus ojos picar. por alguna razón, deseaba llorar.

"sí, lo sé." michael se dio media vuelta para echarle un último vistazo antes de regresar a su mesa, en donde él sentía que sí lo querían. "todos cambiamos, luke."

el rubio lo vio marcharse y bajó lentamente la mirada, una escurridiza lágrima cayendo dentro de su intacto milkshake.

~:~

apuesto mil lukes a que todas cantaron why the fuck you lying cuando lo mencioné smh

dedicado a @CherriSummer

bro ✻ mukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora